Algo tan común y simple como usar una sombrilla, unas gafas, una gorra, una camisa manga larga o simplemente usar bloqueador solar varias veces al día, puede ayudar a que el cáncer de piel no sea una amenaza para las personas. Y es por esa razón que la Asociación Colombiana de Dermatología inició un recorrido por las instituciones educativas del país para enseñarles a los niños, niñas y adolescentes cómo se puede evitar esa enfermedad que, en el último año, registró en el país más de 1500 veces.
“El cáncer de piel es el tipo de cáncer más común, superando el de seno, cuello uterino y próstata. Estudios del Instituto Nacional de Cancerología evidencian un incremento sostenido del número de casos. Por este motivo, y teniendo en cuenta que la mayor exposición al sol ocurre durante los primeros 20 años de vida, se implementó una campaña a través de la cual lleguen directamente a los niños colombianos”, explican desde la Asociación de Dermatología.
Instituciones Educativas de Bogotá, Barranquilla y Medellín ya tuvieron la experiencia, y con juegos y actividades recreativas, los estudiantes experimentaron las diferentes maneras que existen para la prevención del cáncer de piel.
En Medellín la actividad se realizó en la Institución Educativa Pablo Neruda, donde los alumnos de todos los cursos aprendieron cómo eclipsar el sol para su propia protección.
Amparo Ochoa, una de las dermatóloga que participó de las actividades, explicó que la idea es que desde la niñez se pueda evitar el contacto directo con el sol. “Desde esa edad se debe empezar a evitar el problema, hay que entender que la radicación solar es acomulativa, la piel se va dañando, se va dañando hasta que aparece el cáncer”.
La idea de esta actividad es que se siga replicando en otras ciudades del país con el fin de brindarle más herramientas a los jóvenes en su prevención contra una de las principales enfermedades: el cáncer de piel.
