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Caninos y felinos requieren un cepillado de dientes al igual que las personas, de lo contrario pueden contraer problemas que les cause dolores intensos. Eso confirman los especialistas.
La domesticación hizo que los hábitos de alimentación y juegos no fueran los mismos, estos cambios afectan la salud oral, como no ocurre con los animales que viven en su hábitat, comenta Paula Vélez, médica veterinaria y odontóloga de la U. de Antioquia.
Cuando no hay una higiene adecuada, las mascotas padecen, principalmente, de la enfermedad periodontal. Acumulan placa bacteriana que, posteriormente, se vuelve sarro o cálculo, comenta Isabella Quiroga, médica veterinaria del Centro de Veterinaria y Zootecnia de la Universidad CES.
Estas afecciones generan inflamación en las encías, sangrado, ocasionan la pérdida de piezas dentales y producen infecciones generalizadas, que pueden llegar a otros órganos del sistema respiratorio, corazón, riñones o hígado.
Explica que, al momento de masticar, acumulan gran cantidad de bacterias en la boca, estas se liberan en el torrente sanguíneo y, por tal motivo, llegan a otras partes del organismo.
En felinos, además, hay otras dos enfermedades específicas. La primera es la resorción odonclástica, que se trata de la destrucción de los tejidos dentales y puede aparecer en cualquier parte de un diente.
La segunda es la gingivitis crónica, en la que las encías se inflaman. “Es una reacción del sistema inmunológico, que responde de forma exagerada a la placa bacteriana que se ha acumulado”.
El mal aliento es el signo por el que más consultan los dueños de caninos y mininos al veterinario, cuenta la especialista.
Pero también es de gran importancia observar si hay inflamación en las encías. Por lo general estas se ponen rojas. Otro síntoma es el sangrado bucal.
En la página web de la Asociación Americana de Médicos Veterinarios (AMVA, por sus siglas en inglés) se lee que otros síntomas son: dientes rotos o flojos, adicionales o de leche retenidos, decolorados, masticación anormal, babeo, apetito reducido e hinchazón en esa zona.
Es necesario hacer una revisión temprana de la salud bucal de los peludos, así no presenten afecciones.
Paula Vélez recomienda cepillarlos diariamente, debido a que esto va a evitar cualquier tipo de patología y si no se hace con esta frecuencia no ayudaría, porque después de 24 horas de tener adheridos restos alimenticios se dificulta remover la placa.
Según el perro y el estado de su cavidad oral, los especialistas sugieren un cepillo y una crema dental que no puede ser la que comúnmente se utiliza en casa. La razón es que esta contiene alto flúor que puede provocar intoxicación.
Por otro lado, existen algunos snacks que pueden ayudar al proceso de limpieza. Estos ayudan a remover el cálculo y hacer una fricción sobre los dientes. Los huesos extremadamente duros no son recomendables.
Vélez explica que cuando los propietarios no hacen un tratamiento preventivo, se debe realizar un proceso en el que las mascotas son anestesiadas. Si esto no ocurre representa un riesgo para sus vidas, por eso es mejor evitar los problemas dentales.