Por María Antonia Giraldo Rojas
La carrera de Gustavo Santaolalla ha sido una búsqueda constante del sonido latinoamericano. Él, desde siempre, supo que la única manera en que la música joven del continente fuera valiosa, era mezclando las raíces folclóricas con los sonidos internacionales contemporáneos.
De esa forma nació su primera banda, Arco Iris, y ese mismo fundamento acompaña su trabajo como productor y realizador. Así surgieron los sonidos de León Gieco, Juanes, Café Tacuba, Molotov, Julieta Venegas y Bajofondo, yendo a beber a los manantiales de la música.
Hoy se presenta en concierto con esta última banda en Medellín, en la gira de su álbum Presente, nominado a tres grammy latinos incluyendo álbum del año y mejor canción alternativa por Pena en mi corazón.
EN DEFINITIVA
Santaolalla imprime su identidad americana en cada uno de sus trabajos. Bajofondo es una muestra de esa mezcla cultural y temporal que hoy por hoy vende discos y boletas de conciertos.