El nuevo ciclo que arrancó Colombia de cara al Mundial de fútbol en 2026, y bajo el mando del argentino Néstor Gabriel Lorenzo, genera optimismo tras la goleada 4-1 del pasado sábado en Nueva Jersey, Estados Unidos, ante Guatemala. Así lo creen el seleccionador nacional, jugadores y expertos de este deporte.
Ante un rival que no está clasificado para la Copa Mundo en Qatar a finales de este año, Lorenzo, con deportistas experimentados y otras jóvenes promesas, supo combinar talento para lograr no solo el contundente triunfo sino también para empezar a recuperar confianza en el seno tricolor tras no lograr el cupo, por tercera vez seguida, al máximo certamen del balompié.
“Empezamos este nuevo proceso con mucha ilusión”, escribió este domingo James Rodríguez en sus redes sociales luego de silenciar críticas gracias a su grata actuación ante los guatemaltecos. No solo estuvo veloz física y mentalmente, también anotó el primer gol del encuentro.
Hasta Lorenzo mostró sorpresa frente al buen nivel que evidenció el jugador que llegó recientemente al Olympiacos de Grecia, y que duro, prácticamente, seis meses sin jugar.
“Lo de James me sorprendió incluso a mí. Sabemos que no está en su mejor momento por continuidad, pero nadie puede negar sus condiciones y la calidad que tiene. Tuvo una actitud muy buena, como todo el equipo, y nos alegra”, indicó el orientador en rueda de prensa.
¿Hay recambio?
Frente a la pregunta si el equipo no tiene recambio, sobre todo al comenzar el encuentro con diez jugadores que ya han estado en la Selección y alinear solo a un debutante, el central Andrés Llinas, el estratega fue claro.
“Nunca se sabe. En una de las charlas les dije a los muchachos que disfruten y aprovechen la oportunidad, porque no se sabe cuál puede ser la última convocatoria. El grupo se irá construyendo con un número más alto de jugadores, porque hay lesionados y otros que no pudieron venir. La idea es que todos apuntemos para el mismo lado”.
Además, enfatizó en que los deportistas de mayor trayectoria son fundamentales para consolidar a los de menor edad.
“No es lo mismo si no están estos muchachos, que tienen experiencia y fueron los encargados de llevar a esta Selección a lo más alto, ya que les quitan la presión a los jóvenes. Para mí, eso estaba claro, pero uno no sabe hasta que sucede. Fue un buen debut de algunos chicos, espero que sigan así”.
Entre ellos resaltó la función de Luis Sinisterra, de 23 años y quien marcó el segundo tanto, y de Yáser Asprilla, de 18 años, y que asistió primero a Rafael Santos Borré para el tercer gol y después, con desequilibrio, anotó el cuarto.
“Ambos entraron en un momento en el que gran parte del desgaste ya lo habían hecho Juan Guillermo Cuadrado y Falcao García, pero la idea era esa, con el fin de que ellos, de una vez, se vayan consolidando, con confianza. A lo mejor, si empezaban como titulares, la historia era otra. Por fortuna, todo salió bien”.
Buen examen
Para Miguel Cadavid, entrenador de fútbol y Licenciado en Educación Física de la Universidad de Antioquia, este inicio de Colombia fue realmente bueno, tanto para el técnico como para los jugadores.
“Mucha gente es exigente al decir que el rival era muy débil, pero con esta clase de contendores es que se empieza a ganar motivación y confianza en un equipo que venía cabizbajo”.
Cadavid agrega que siempre hay que medirse a escuadras de igual, mayor o menor rango. “Cada partido te genera una información. Muchos expresan que ese partido pudo ser fácil, pero si va y se pierde es un acabose para sus protagonistas y puede causar una crisis mayor”.