<img height="1" width="1" style="display:none" src="https://www.facebook.com/tr?id=378526515676058&amp;ev=PageView&amp;noscript=1">
x
language COL arrow_drop_down

La Luis Amigó ya es una universidad

El Ministerio de Educación reconoció el carácter universitario de esta obra educativa en la cual se destaca su carácter social.

  • El reconocimiento de su carácter universitario compromete a ese plantel aún más con sus estudiantes, docentes y la sociedad.
    El reconocimiento de su carácter universitario compromete a ese plantel aún más con sus estudiantes, docentes y la sociedad.
  • El carácter universitario de la Luis Amigó compromete a este plantel a ser más exigente con sus propios procesos.
    El carácter universitario de la Luis Amigó compromete a este plantel a ser más exigente con sus propios procesos.
  • El plan de desarrollo de la Universidad Católica Luis Amigó consideró, también, mejoras en su planta física.
    El plan de desarrollo de la Universidad Católica Luis Amigó consideró, también, mejoras en su planta física.
05 de diciembre de 2016
bookmark

Hay que acostumbrarse a decirlo: Universidad Católica Luis Amigó, porque es así, porque la que hasta ayer fue fundación universitaria, logró ya el reconocimiento del Ministerio de Educación Nacional como universidad.

Un reconocimiento, además, de que la Luis Amigó actuaba en consecuencia como tal, de que a este plantel le había quedado pequeño el carácter de institución universitaria.

“La transición de carácter académico de Institución Universitaria a Universidad Católica Luis Amigó, obedece, junto con otras acciones al compromiso institucional y al trabajo mancomunado de los docentes investigadores que han permitido un progreso social y científico permanente en las regiones, el país y, por consiguiente, en la humanidad”, cuenta la vicerrectora de Investigación de la Universidad, Isabel Cristina Puerta Lopera.

Se trató, pues, de un paso natural en su crecimiento como institución de educación superior, un crecimiento en áreas del conocimiento, en registros calificados, en infraestructura, en número de estudiantes y, en especial, en actividad investigadora. Fue un trabajo de muchos años, que requirió de importantes inversiones tanto en investigación, como posgrados, formación docente e infraestructura, entre otros.

Este reconocimiento es, además, el logro de un objetivo de su plan de desarrollo 2009-2012 y, a su vez, el punto de partida de nuevos retos académicos e institucionales para la Luis Amigó, como la continuación de los procesos de acreditación de sus programas académicos y, claro, la obtención de la acreditación de alta calidad institucional, así como el mantenimiento de los criterios de excelencia académica para su planta docente.

“Tenemos un compromiso mayor, un grado más alto de exigencia que debemos cumplir con los estudiantes, los egresados y la sociedad, formando profesionales críticos y éticos para que aporten en su transformación”, sostiene el vicerrector académico, Julio Alexánder Ortiz Montoya.

Social desde su origen

Fundada en 1984, esta institución de educación superior tuvo, desde su principio, una vocación social.

Inicia como un instituto psicopedagógico enfocado en formar profesionales para la docencia en el campo de la pedagogía reeducativa, recuerda su vicerrector académico, pero pronto la institución entendió que si quería lograr una transformación social en sus estudiantes y egresados, necesitaba mirar cómo, desde las diferentes áreas del conocimiento, podía impactar la sociedad y empezó a ampliar su oferta de programas académicos, todos con una orientación social y solidaria.

“Hablar de la Universidad Luis Amigó no es hablar simplemente de una institución de educación superior de las muchas que existen en el país, es hablar ante todo de una obra pastoral que encuentra su identidad más profunda en las venas mismas del carisma amigoniano”, expresa su rector, el padre José Wílmar Sánchez Duque. Un carisma que entiende la educación superior como “un nuevo camino para ser respuesta que incida en la construcción de una sociedad, más fraterna, justa, pacífica, equitativa y solidaria”, concluye el rector.

Investigación y calidad, claves

Si hay algo que identifique el actuar de una universidad es la creación de nuevo conocimiento, la reflexión sobre el saber y el análisis de este para impactar de manera positiva en la sociedad en la que se inscribe.

Estamos hablando de investigación, una de las funciones sustantivas de todas las instituciones de educación superior y de la Universidad Católica Luis Amigó, por supuesto.

“Nosotros somos una universidad de docencia con investigación de calidad”, señala el vicerrector académico de la Luis Amigó, Julio Alexánder Ortiz Montoya.

Esta universidad “cuenta en la actualidad con 14 grupos de investigación clasificados por Colciencias, con sus respectivas líneas de investigación, que responden al direccionamiento educativo actual mediante el Sistema de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior”, indica la vicerrectora de Investigación, Isabel Cristina Puerta Lopera.

El número de grupos existentes representa la evolución propia de la investigación en el interior de la Universidad Luis Amigó, fruto de un proceso de direccionamiento estratégico planificado que proyecta al plantel como una institución que forma, enriquece y genera conocimiento con un alto grado de responsabilidad social, agrega la directiva.

Crece en formación

Actualmente, la Universidad Católica Luis Amigó cuenta con 16.028 estudiantes de pregrado y 628 de posgrado en sus seis sedes en el país (ver recuadro), cursando programas en sus diferentes áreas del conocimiento: ciencias sociales; educación; derecho y ciencias políticas; ciencias administrativas, económicas y contables; ingenierías; y comunicación social, publicidad y diseño.

“Durante el periodo comprendido entre los años 2009 y 2016 se crearon en total 43 programas nuevos”, expone el vicerrector académico.

Agrega el directivo que “toda esta dinámica de crecimiento en la oferta educativa, así como los procesos de acreditación voluntaria en alta calidad de varios de sus programas ha impactado notoriamente el crecimiento de la población estudiantil, evidenciándose un incremento durante el periodo 2009-2016 del ciento por ciento”.

Docentes de calidad

Lograr el reconocimiento como universidad exigió que esta institución reforzara su planta docente y sus perfiles de formación. Durante el periodo 2009-2016, se pasó de 94 docentes de tiempo completo a un total de 331, lo que representa un crecimiento del 352 por ciento.

Actualmente, el 55 por ciento de los docentes de la Universidad Luis Amigó tienen formación en maestría o en doctorado, lo que ha redundado en avances en el campo de la investigación y la publicación en revistas indexadas, es decir, más calidad para la U.

Te puede interesar

El empleo que busca está a un clic

Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD