Michelle Obama se ha caracterizado por ser una mujer con muy buen gusto y estilo al vestir. Esta semana lo demostró en medio de la gira de promoción que hace de su libro Mi historia.
Al lado de otro ícono de la moda como lo es Sarah Jessica Parker, la exprimera dama norteamericana llegó a Nueva York para conversar sobre este libro y sus planes lejos de la Casa Blanca.
La ovación fue total y más cuando el vestido amarillo con el que llegó al escenario dejó ver unas botas doradas que no solo destacaron su altura (1.80 m) sino su elegancia.