<img height="1" width="1" style="display:none" src="https://www.facebook.com/tr?id=378526515676058&amp;ev=PageView&amp;noscript=1">
x
language COL arrow_drop_down

Los diseños retro llegan a los SUV modernos

La tendencia: diseño que evoque el pasado y que se vea actual y moderno. El turno es para el Bronco y pasó por las manos de EL COLOMBIANO.

  • Así luce la renovada Ford Bronco con la esencia y el diseño de la primera generación de este tipo que se vio en el mercado internacional. FOTO cortesía
    Así luce la renovada Ford Bronco con la esencia y el diseño de la primera generación de este tipo que se vio en el mercado internacional. FOTO cortesía
12 de enero de 2022
bookmark

El nombre Bronco tiene bastante arraigo entre los todoterrenos fabricados por Ford, especialmente en Colombia, donde se comercializaron de una u otra forma sus generaciones, desde la primera que llegó allá por 1966 y que aún se ve rodar por nuestra geografía hasta la última, que llegó al país en 1997. Más de medio siglo después, el fabricante norteamericano revive el nombre y, de cierta manera, el diseño de ese primer modelo.

¿Cómo es?

Esta corresponde a la sexta generación del Bronco y es la primera vez que tiene una carrocería de cuatro puertas. El modelo comercializado en Colombia corresponde a la versión Sport y llega en dos niveles de acabado: Big Bend y motorización 1.5 turbo de tres cilindros y el que probó EL COLOMBIANO, un 2.0 turbo de 240 caballos y caja automática de ocho velocidades, con el nivel de acabado Wildtrak, cuyo precio es de $164,9 millones.

El chasis es monocasco, y en esta plataforma, de 4,3 metros de larga, también va montado otro modelo de la marca, el Escape. Tiene sistema 4x4 con bloqueo de diferencial y varios modos de manejo denominados G.O.A.T (Go Over Any Terrain), entre los que se encuentran Lodo / Surcos, Resbaladizo, Arena, Rocas, Sport y Eco. Los rines son de 17 pulgadas en aluminio. La altura al piso es de 22,4 centímetros y la capacidad de vadeo de 60.

Interior

Está compuesto por materiales duros en el tablero, con clara vocación offroad. Son de buena calidad al tacto y están bien presentados y ajustados. Un dato curioso es el tono marrón de la cojinería, de ajuste eléctrico, en combinación cuero/alcántara. El panel de instrumentos es análogo, pero con pantalla central digital y varios modos de visualización según el tipo de manejo escogido. El arranque es por botón y tiene sistema Start / Stop.

La pantalla de infoentretenimiento es de 8 pulgadas con interfaz Sync 3,4. La climatización es automática bizona y tiene cargador inalámbrico de celular. Los cambios se enganchan mediante un selector giratorio en la consola central y la sensación de calidad es algo delicada. Tiene levas de cambio tras el volante, que es regulable en altura y profundidad. El equipo de audio, con diez altavoces, va firmado por Bang & Olufsen.

Atrás se pueden acomodar tres pasajeros y hay buena holgura para los pies y la cabeza (2,65 metros de distancia entre ejes). Los espaldares de las sillas delanteras tienen bolsillos con cierre y bajo los asientos traseros hay sendos compartimentos ocultos. El acceso al baúl se hace por el vidrio trasero o por la compuerta. El baúl acomoda 833 litros y hay un práctico destapador de botellas en uno de los parales. También tiene una cubierta que se convierte en mesa para usar al aire libre.

El equipo de seguridad tiene nueve airbags y numerosos sensores, controles, asistencias, alertas, detectores y ayudas a la conducción.

En marcha

El motor Ecoboost 2.0 con 250 caballos y 376 Nm de torque, impulsan supremamente bien esta camioneta compacta. La aceleración, una vez engancha el turbo (un poco demorado), es contundente. En carretera se lleva muy bien con las camionetas rápidas y sale muy bien librada de cualquier situación que requiera velocidad y salidas inmediatas.

Pero donde más nos divertimos con la Bronco fue en el manejo por fuera del asfalto. Realmente no aparenta lo que puede dar en la conducción todoterreno y pudimos comprobarlo con los modos de rocas y lodo, donde la sometimos a caminos fangosos y bastante quebrados y el agarre fue perfecto gracias al bloqueo de diferencial. También, aprovechando una jornada de fuertes lluvias que nos acompañó, en el modo para manejo en superficies resbaladizas el comportamiento fue excelente. El control de descenso, hasta 31 km/h, es de gran ayuda, así como los amortiguadores firmados por Fox.

La caja, con funciones que se adecuan a los modos de manejo, adapta los cambios más bajos para sacarla de cualquier dificultad, aunque en alguna prueba previa presentó sobrecalentamiento. Según concluyeron representantes de la marca, fue por el uso equivocado de gasolina corriente por parte de otro usuario

$164,9
millones es el valor comercial de la versión sport que llegó a Colombia.

Te puede interesar

El empleo que busca está a un clic

Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD