Tiene que ver con correr, porque hay cinco kilómetros de recorrido, pero el deporte es lo segundo y el premio es lo de menos. Nadie gana. Lo importante tiene que ver con el nombre, The color run, es decir, qué tan llenos de color quedan los participantes.
"Estos son los 5K que celebran la vida, la alegría, la unidad, el momento con la famila y los amigos. Es una carrera en la que en cada kilómetro te llenan de color", explica Felipe Arbeláez, el director general.
Es la primera vez que se hace en Colombia y la de Medellín, que es el 1 de septiembre, abre la gira por Latinoamérica.
La segunda ciudad será Bogotá, el 8, y luego repetirá Medellín, el 29, porque las inscripciones se acabaron y habían más personas con intenciones de colorearse.
"Esto es una línea de negocio internacional que celebró alianza con Latinoamérica. Se realiza desde hace dos años en Estados Unidos y es un formato que está en la primera línea de entretenimiento". En este país se ha convertido en un fenómeno, que ha contagiado al mundo: más de 50 países la han hecho o la harán.
"Aunque esta no es particularmente una competencia, me parece divertida. Cada minuto de ejercicio es como una inyección de energía. Vamos a ir todos los de mi clase", cuenta Carolina González.
Las carreras tienen un cupo limitado, precisa Felipe, por temas de servicio y operación. Serán 10 mil personas en cada una.
Los 5k más felices del planeta, como se le conoce, invitan a la diversión. A cada persona le entregarán un kit con una camiseta blanca, gafas, tatuajes, gorros y bolsas de colores. No obstante, señala Felipe, las sorpresas son más. Todavía hay cosas que no se cuentan. El final será para la música y más color.
El polvo que se les lanza a las personas es natural y cada vez es diferente. "La idea es que llegues a la meta lleno de color". No hay edad. La invitación es para niños, grandes, papás con los hijos, jóvenes. Cualquiera. De eso también depende la carrera: de los lazos que se van formando para pintarse y reírse. Para nada más.
"Casi todos los de mi carrera vamos a ir. Yo quiero estar por los colores diferentes, porque es una actividad fuera de lo normal, de lo que uno hace. Uno va por pasar bueno, te puedes ir hasta vestido diferente", dice Mariana López. Tiene su boleta desde el mismo día que las empezaron a vender.
The color run no tiene más palabras. Básicamente, divertirse en colores.
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6
