Personal de la ONU utilizará este viernes un "pequeño corredor humanitario" que fue abierto desde Goma hasta Kibali para llevar ayuda a miles de desplazados por los combates de los últimos días entre el ejército de la República Democrática del Congo (RDC) y fuerzas rebeldes.
Así lo anunció la portavoz de Unicef, Veronique Taveau, quien precisó que los cooperantes aportarán la primera ayuda de emergencia a la localidad de Kibali, ubicada a 10 kilómetros de Goma, capital de la provincia Kivu Norte, escenario de los enfrentamientos.
Taveau no pudo precisar quiénes habían autorizado el paso de los representantes de la ONU porque "aún no sabemos precisamente quién controla qué".
Situación tensa
Por su parte, la portavoz de la Oficina de Ayuda Humanitaria de la ONU, Elisabeth Byrs, sostuvo que la situación es "muy compleja y confusa" y confirmó que el alto al fuego declarado hace dos días por los rebeldes se mantiene, a pesar de cual "la situación de seguridad es tensa".
Señaló que las últimas informaciones recibidas desde la zona corroboran que las fuerzas armadas congoleñas han abandonado Goma, mientras que los rebeldes tutsis del Congreso Nacional de la Defensa del Pueblo (CNDP) se mantienen "a algunos kilómetros de la ciudad".
Cifras
Informaciones provenientes de Kibali daban cuenta en las últimas horas de que 45.000 desplazados habían abandonado dos campamentos ubicados en esa ciudad a causa de los combates, una situación que Naciones Unidas verificará hoy gracias al acceso que acaba de conseguir.
Por otra parte, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur) señaló este viernes que recibió informaciones alarmantes de que varios campamentos de desplazados (con un total de 50.000 personas) en la ciudad de Rutshuru, a 90 kilómetros de Goma, "han sido vaciados por la fuerza, saqueados y quemados".
El portavoz de Acnur, Ron Redmond, indicó que se calcula que el número global de desplazados en la zona del conflicto (este del país) se eleva actualmente a 1,2 millones de personas, frente a las 847.000 que se calculaba había en abril pasado.
Además, los enfrentamientos de la última semana provocaron que miles huyeran en dirección a la frontera con Uganda y, desde agosto pasado, cuando se reanudó el conflicto, se estima que unos 8.500 refugiados han logrado cruzar hacia ese país.