Momento de entrar a la piscina gigante. Para el antioqueño Alejandro González llegó el día de meterse en los torneos más importantes, entre ellos el Abierto de Australia, el primer grande de su carrera profesional.
González, quien mantiene su proyecto en solitario con el apoyo del Grupo Argos y ahora vestido por Adidas, hizo su pretemporada en Buenos Aires, junto a su entrenador argentino Pablo Fuente. Ayer viajó hacia Sao paulo, Brasil, donde el lunes arrancará en firme su competencia.
"Arrancamos en el challenger grande, de 125 mil dólares, como preparación del Abierto de Australia, que será mi segundo torneo. Luego será la gira de Suramérica (Buenos Aires, Sao Paulo, Viña del Mar)", sostuvo Alejandro, quien terminó el año en la casilla 91, como el segundo colombiano, solo detrás de Santiago Giraldo (puesto 69), pero por delante de Alejandro Falla (99). Es el tercer antioqueño en ser top-100 tras Iván Molina y Álvaro Betancur, ambos en la década de los 70.
Alejandro vivió un excelente año, ganando tres torneos challenger, siendo finalista en uno más, y avanzando más de 200 casillas en el escalafón profesional ATP. Ahora, con su nueva posición, debe dejar de jugar challengers para meterse en los torneos ATP 250 y 500, que son más competitivos, pero que también generan más dividendos en puntos y plata.
"Voy a tener torneos más duros, con diferentes rivales, más importantes. Para eso me estoy preparando muy bien, para tratar de salir a triunfar y sobresalir en este nivel", anotó el antioqueño, que empieza su año histórico.
Pico y Placa Medellín
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