La violencia en El Salvador llegó ayer a niveles inesperados luego de que las autoridades confirmaron la muerte de 17 personas, 14 de ellas incineradas en un bus, en dos ataques de delincuentes contra unidades del transporte colectivo en el norte de la capital que dejaron, además, por lo menos 15 heridos.
Una fuente de la Fiscalía General confirmó que 14 cuerpos calcinados fueron recuperados en la madrugada de ayer en un autobús al que desconocidos prendieron fuego en el municipio de Mejicanos, en el norte de la capital salvadoreña.
"Están muy quemados y no se puede verificar a simple vista si fallecieron por las quemaduras o si les habían disparado antes", indicó en relación con las víctimas en el autobús quemado.
Los cuerpos de las 14 personas, entre los que se encuentra el de una recién nacida, fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal, donde familiares iniciaron las acciones de reconocimiento.
Por otra parte, la Policía Nacional Civil (PNC) confirmó un ataque perpetrado por desconocidos contra otro vehículo de transporte colectivo en una zona del noroeste de San Salvador, en las cercanías de Mejicanos, con un saldo de dos niños y un hombre asesinados a tiros.
La fuente de la Fiscalía indicó que en ambos hechos por lo menos 15 personas más resultaron lesionadas.
Una familiar de una de las víctimas, que prefirió no revelar su identidad, indicó que espera recibir datos de su ser querido en el transcurso de la semana, ya que el estado de los cuerpos ha complicado las tareas de reconocimiento.
Una fuente de la PNC detalló que los responsables de la Policía están reunidos de emergencia desde ayer y que existe un número indeterminado de capturados que prevén presentar públicamente en corto tiempo.
"Es un hecho que ya cae en el terrorismo", dijo a la prensa en el lugar donde fue incendiado el vehículo el jefe de la PNC, Carlos Ascencio.
Mientras que el ministro salvadoreño de Seguridad, Manuel Melgar, prometió que el hecho "no quedará en la impunidad" y trasladó las condolencias de parte del Gobierno a las familias de las víctimas.
Esta es la primera vez que en El Salvador, donde la violencia deja un promedio de 11 a 13 asesinados por día, delincuentes queman un autobús con sus pasajeros adentro.
Desde hace unos años el sector del transporte es víctima de asesinatos de trabajadores o quema de unidades supuestamente por el no pago de extorsiones a grupos de delincuentes, principalmente pandilleros.
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