Su conexión con la zona social la convirtió en un punto de encuentro, de reunión, un espacio donde el ritual de cocinar se acompaña con el de servir y compartir.
El diseño responde a esta tendencia con un amplio portafolio de alternativas para que cada quien pueda organizar su cocina a la medida de sus gustos y necesidades, claro está, de la mano de un profesional.
Otros componentes que hacen parte vital de esta "receta" son los avances en electrodomésticos, cada vez más eficientes, y las aplicaciones a tono con el cuidado del medio ambiente.
Al diseñar hoy se privilegia la libertad para combinar materiales, muebles y accesorios, con el propósito de lograr un resultado único y personal.
Fachadas
En las cocinas actuales se imponen los diseños horizontales, las fachadas limpias, "con módulos de gran tamaño y sin muchas divisiones", comenta Alexander García, arquitecto y director comercial de Tolentino.
En ellas los cajones juegan un papel protagonista como opciones para guardar y ordenar. Se caracterizan por ser de extracción total y autocierre suave y silencioso.
Las puertas batientes siguen vigentes, pero cobran mayor fuerza, como solución para almacenar en altura, los gabinetes con puertas basculantes.
Materiales y colores
Melaminas, chapillas, fórmicas y aglomerados, claros y oscuros, con o sin vetas, hacen parte de las alternativas de materiales para revestir los muebles de cocina.
La tendencia, coinciden los expertos, es por colores claros y tonos medios, aunque en esta elección cuente mucho el gusto personal.
Otras opciones que están marcando tendencia en el mobiliario son la pintura de poliuretano y el vidrio, que puede ir en diferentes colores y niveles de transparencia. Es un material muy usado para darle ligereza a los muebles superiores. Mezclar y contrastar, es clave.
Simple y clara
Cocinar, servir y compartir. Para vivir esta experiencia a plenitud el diseño de esta cocina, a cargo de Dell Anno Mobiliario, apostó por integrarla a la zona social, por muebles con acabado en melamina blanco y acentos de acero en la barra, la campana y en los electrodomésticos.
Una necesidad particular del propietario, cuenta la arquitecta Natalia Echeverri, era contar en este espacio con un bar - biblioteca. La solución fue una retícula de vinos y entrepaños dónde exhibir cristalería, libros y elementos decorativos.>>
Cajones personalizados
Tener un cajón para cada necesidad. Eso es lo que permite la cantidad de herrajes que ofrece hoy el mercado. Para las ollas y la vajilla; para optimizar las esquinas y para tener a la mano el aceite y los condimentos. Dos muy prácticos: los ocultos, pequeños cajones que van dentro de otro más grande, ideales para los cubiertos; y los basureros, que aprovechan el espacio debajo del pozuelo.
Manijas ocultas
Ya no es tan común usar manijas en los muebles, comenta Alexander García. De llevarlas, se prefieren las de acero o aluminio. Sin embargo, la tendencia es que no se vean. "Se hacen empotradas dentro de los mismos frentes de los muebles", explica Natalia Echeverri. El sistema push es otra alternativa: las puertas y cajones se abren con solo tocarlas. Genera una mayor limpieza visual.
Zoom a los detalles
La grifería, alta y estilizada, se presenta monocontrol y con sistemas ahorradores de agua. Incorporar el dispensador de jabón dentro del mesón es una solución que cada vez se valora más.
En las campanas hay otro ingrediente de diseño: piramidales, planas, cilíndricas, cuadradas, en vidrio o en acero, son elementos funcionales y muy decorativos.
Vidrio sofisticado
Una imagen moderna, que continuara con la esencia blanco y negro del resto de la casa, fue lo que se buscó para esta cocina, diseñada por La Casa Ideal.
Dos materiales predominan en sus muebles: vidrio templado y barnizado negro, con marcos en aluminio, y un laminado de alta presión con cantos en aluminio y acabado en acero.
Tanto el brillo del vidrio como el del mesón, un granito natural negro absoluto, "ayudan a que el espacio no se vea recargado", señala el arquitecto Rodrigo Arango. >>
Mesones
El quartzone es el material más usado para la fabricación de mesones. Sus ventajas: dureza -tiene cuarzo- y poros cerrados lo hacen fácil de limpiar y aséptico. Además, viene en una amplia paleta de colores. Los materiales sintéticos, tipo corian y granato, ofrecen muchas posibilidades al diseñar con ellos. El granito, la piedra y el acero inoxidable seguirán vigentes.
Islas
Aunque la forma de la cocina la determinan los metros cuadrados disponibles, es común ver muchas cocinas tipo isla, que proporciona mucho espacio de almacenaje y una mayor superficie de trabajo. Esta fórmula también se puede llevar a viviendas de pocos metros, ubicando en un mueble todos los servicios y al frente una isla con barra.
Sencilla y cálida
La madera y el blanco marcan el diseño de esta cocina social, un trabajo de la firma Pezeta Diseño y Mobiliario. Ocultar, guardar, lograr una estética muy limpia y desocupada de objetos y electrodomésticos fue una de las premisas de esta propuesta. En ella se destacan las líneas rectas del mesón de granato y, sin duda, el mueble de fondo: una composición de puertas fabricadas en chapilla nogal mallado natural. "Se diseñaron con distintos tamaños y con las vetas encontradas, unas horizontales y otras verticales, para darle movimiento", explica María Paula Zuluaga, gerente de Pezeta.
Barras
La conexión de la cocina con el comedor no desplaza el uso de la barra. Para la arquitecta Natalia Echeverri el comedor es para experiencias más largas y más personas, mientras que la barra es una solución muy útil para el día a día.
En muchos casos, el material que se utiliza en el mesón o en la isla se continúa en esta mesa auxiliar. Sin embargo, la arquitecta de Dell Anno recomienda cambiarlo "para enriquecer el diseño".
Es ideal que la cocina, al estar íntimamente vinculada con la zona social, guarde armonía con los espacios que están a su alrededor
Electrodomésticos
Son protagonistas en la estética depurada que impera en este ambiente. Además de la cubierta, la torres de hornos, la campana extractora y la nevera, los expertos coinciden en señalar a dos equipos como nuevos integrantes de la cocina: el lavaplatos eléctrico y la nevera de vinos.
Con el primero se busca comodidad y, pese a lo que se podría creer, ahorro en el consumo de agua. El segundo responde al creciente interés por el mundo del vino.
Una práctica muy común es empotrar algunos equipos con el fin de dejar los mesones libres y ganar espacio en las superficies de trabajo.
Moderna y funcional
Uno de los objetivos para el diseño de esta cocina, comenta el arquitecto Alexander García, de la empresa Tolentino, era que la isla no fuera solo un mueble decorativo sino que se convirtiera en el centro de atención del espacio. El resultado fue una isla multifuncional, que hace las veces de zona de cocción, de preparación, de lavado y de almacenamiento. Además, por su amplio mesón, sirve también como barra. Chapilla roble oscuro y fórmica negra brillante con cantos en aluminio definen el look moderno de esta cocina.