Los escritores Fernando Savater y Ángela Vallvey invocaron su "amor a la lectura" al recoger los premios de ganador y finalista del 57 Premio Planeta, respectivamente, en una velada literaria en la que no han faltado los recuerdos al patriarca del galardón, "el viejo Lara".
Fernando Savater aseguró tras conocerse el fallo que la novela ganadora, La Hermandad de la Buena Suerte es "una ficción, pura e inventada, que no se parece a lo que se lleva ahora, es decir, no sale la Guerra Civil española, ni la Guerra Mundial, ni la de Troya, ni la de la Independencia".
"Tampoco sale ninguna catedral, ni la de Barcelona, ni la de Vitoria, ni Notre Dame, ni ninguna capilla, y en cambio sí salen las carreras de caballos", ha añadido el ganador.
Savater define su libro como "una novela de aventuras y desventuras, un poco metafísica y ambientada en el mundo de las carreras de caballos".
Vacaciones "de sí mismo"
El autor desarrolla la trama a partir de la historia de una gran carrera que se avecina y de un jinete desaparecido, que se supone montaba el caballo ganador.
El filósofo español señaló que su pretensión es "mantener el interés del lector, tanto por lo que los personajes piensan como por lo que ocurre" y al tiempo intentó que cada capítulo tenga una entidad propia.
En la novela ganadora no incluyó referencias de sus ensayos: "Como mis lectores ya están resignados a aguantar mis sermones de filosofía, política y nacionalismo, en la novela me he tomado unas vacaciones de mí mismo cuando la escribía", y ha añadido que no le gustan las novelas con teorías, porque "eso sería como regalar una novela con el precio puesto".
Sin embargo, ha admitido que el lector quizá descubrirá alguna mención o pequeño homenaje a sus admirados Cioran o Borges, o a Pío Baroja.
Por puro placer
La novela finalista, "Muerte entre poetas" es, según Ángela Vallvey, "un homenaje que yo me doy gracias a Agatha Christie".
En la obra de Vallvey, explica la autora, "hay una señora mecenas viuda de un egregio poeta, que convoca una reunión poética en un cigarral en Toledo y allí las cosas se complican con un asesinato".
Al preguntarles a ambos por la tendencia actual a las novelas históricas de conspiración, Savater se declaró un lector y un escritor "hedónico", que sólo lee y escribe lo que le gusta.
Precisamente, el título de la novela ganadora del Planeta es "una pequeña broma, un guiño a que mi novela es lo menos esotérico del mundo".
Vallvey no siente que pueda tener capacidad para cambiar ciclos o marcar tendencias en la novela, pero piensa que "los libros son interesantes independientemente de las tramas conspiranoicas que incluyan, algo que responde más a una moda o una corriente".
La escritora de Ciudad Real (centro) quiso dejar constancia de su "admiración por Fernando Savater, como un intelectual de peso en este país"
En nombre del jurado, el debutante Álvaro Pombo indicó que las dos novelas ganadoras son "tan distintas como un huevo y una castaña: Por un lado, tenemos un elogio del caballo, y por otro una refutación de los poetas".
El primer Premio Planeta está dotado con 601.000 Euros y el finalista con 150.250 euros.