A la fotogénica Medellín se le podrá recorrer a todo color, pasando las páginas de un papel que provoca tocar y con la complicidad de una diversión acaramelada.
La ciudad tiene su álbum de 256 láminas, que arranca en el Pueblito Paisa y termina mostrando la formación musical en los barrios. La 11 muestra el Parque Biblioteca España, la 232 hace estación en el Jardín Botánico, la 49 pasa por el metro, la 175 por los hospedajes en los corregimientos y la 250 antoja de mazorcas con mantequilla.
Medellín es un caramelo es el nombre de esta colección que promocionará el municipio, su arquitectura, los complejos deportivos, los sitios más turísticos, los rostros, los programas de la administración y las tradiciones paisas. La familia Torres, que lo conoció ayer, se animó a pegar láminas de una vez.
Las hermanas Eumelia y Miriam se acordaron de lo emocionante que era llenar un álbum y sus niños lo querían solo para ellos. "Es muy divertido. No veo la hora de llenarlo", insistió Kevin Cartagena Torres, de 9 años.
Rafaela Díaz y Alejandra Fuentes, de Bogotá, pasarán el puente en la ciudad. Con mapa y cámara en mano decidieron iniciar el plan del día en La Alpujarra. No habían podido ubicar el edificio Carré, pero gracias a la imagen que encontraron en el álbum lo identificaron.
"La idea es que se llene con amor y con orgullo al ver las transformaciones", expresó Mario Alberto Velásquez, de la Secretaría de Cultura Ciudadana de Medellín.
Se imprimieron 25 mil ejemplares. La Alcaldía repartirá gratuitamente algunos en instituciones educativas y a través de concursos. Otros podrán comprarse en puestos de revistas y centros comerciales, y la idea es que la gente comience a intercambiar caramelos, pues habrá premios para quienes lo terminen. También podrá llenarse en la web.
Guillermo Quintero, contador, cree que esto no solo se lo van a gozar los niños, "lo haremos todos. Pegar láminas nos traerá recuerdos y nos mostrará lo mejor de la ciudad".
Pico y Placa Medellín
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