Gisela Zivic tiene claro que los suyo es la música, es la ópera, una pasión que le ocupa la mayor parte de su vida y que le deja poco tiempo para otras actividades, como la televisión.
A raíz de sus compromisos nacionales e internacionales, la soprano argentina, radicada hace más de 15 años en Colombia, decidió, de común acuerdo con Teleantioquia, renunciar a la presentación de Serenata, en una determinación que ella misma define como "respeto al televidente".
Lo cierto es que el año pasado Gisela estuvo dos veces en Europa, en temporadas internacionales de ópera, compromisos que la alejaron de la presentación en Telantioquia. Para este 2009 la agenda de la artista es mucho más intensa (en este momento está en Caracas, Venezuela) y por eso decidió, por simple respeto al televidente, dejar Serenata.
Gisela se va feliz de Teleantioquia por el cariño que le dieron los televidentes, pero con la desazón de no poder hacer más "cultura" a través de Serenata. La soprano, fundadora de la Fundación Prolírica de Antioquia, habló con la revista VIERNES sobre esta decisión.
¿Por qué decidió renunciar a la presentación de Serenata?
"Es una decisión conjunta con el canal. En 2008 viajé bastante, pero logré de alguna manera organizar la agenda y cumplir con Serenata. Cuando llegué al programa dejé claro que ante todo soy cantante de ópera, eso es lo primero, y como artista viajo no solo por Colombia, sino por el mundo".
¿Entonces todo se simplifica a falta de tiempo para cumplir con el programa ?
"Llegamos a un acuerdo con Teleantioquia, porque no es bueno para el canal, no es bueno para mí y no es bueno para el público. En mi despedida al aire les dije que los quiero a todos, pero que ellos (los televidentes) merecen respeto".
¿Qué balance hace del tiempo, un año, que estuvo como presentadora de uno de los espacios más representativos de Teleantioquia?
"Increíble el cariño de la gente, ese mismo que siempre había recibido como cantante, pero que ahora con el programa pude sentir más de cerca. La gente me demostró mucho cariño, contrario a lo que se dijo en varios medios de comunicación".
¿Le quedó gustando la televisión, piensa regresar a la televisión?
"A mi la televisión me encanta, me gustaría seguir presentando más adelante, pero veo el tiempo muy complicado. Yo siempre he querido al canal, con Teleantioquia ya había estado con el espacio Luces y centellas (infantil) y luego estuve con la revista Magazin".
¿Cómo persona y artista que le deja Serenata?
"Con Serenata me queda la satisfacción que le pude llevar a la gente arte, cultura y entretenimiento. El programa también me posibilitó ir a municipios como Anorí o Santo Domingo, que no conocía.
De lo que me queda como persona es John Jairo como amigo".
¿Qué piensa de la polémica que se generó con su llegada y la de John Jairo Torres al programa?
"Me dio mucha risa todo lo que se habló en los medios, pero no le paré bolas porque cuando uno es artista está expuesto a las buenas y malas criticas. Todo el mundo tiene derecho a expresarse, pero como artista tengo mi integridad y la tranquilidad de estar haciendo bien las cosas".
¿Es verdad que había problemas entre ustedes los presentadores y Héctor Garcés, el director?
"Me da risa porque salieron cosas que no eran verdad, como que había problemas entre Héctor Garcés (director del programa) y John Jairo Torres (presentador y director artístico). Ellos no son los más amigos, pero no tienen problemas. Yo con Héctor nunca tuve inconvenientes, lo conozco desde hace rato y lo respeto como profesional y como persona".
¿Qué le quedó faltando como presentadora de Serenata?
"Me faltaron muchas cosas que quería hacer con John Jairo, más pedagogía y más cultura. También queríamos cambiar la imagen general del programa, queríamos impactar más.
Me hubiera gustado un programa más cultural, más instructivo. En los primeros meses de esta nueva etapa de Serenata lo intentamos, pero al público no le gustó mucho y volvimos a la esencia tradicional del programa, la música. Esa parte cultural sí me faltó".
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