El equipo español de nado sincronizado nadará sin el traje con luces que traían como innovación, tras un arreglo amistoso con la Federación Internacional de Natación (Fina), explicó este lunes un responsable de prensa del organismo.
Con "leds", una batería y un interruptor pequeños, la prenda venía en las maletas para que las españolas se lo enfundaran en el ejercicio libre "África", una original rutina a la que la entrenadora Anna Tarrés quería dar una vuelta de tuerca en forma de bañador luminoso.
Según explicó a Efe el responsable de la Fina, Tarrés y los técnicos del organismo llegaron a un acuerdo privado para no llevar el traje, pese a que los técnicos españoles llevaban consigo las pruebas de que no había peligro de que nadie se electrocutara.
Contra todos los esquemas
Las nadadoras del dúo Gemma Mengual y Andrea Fuentes, que este lunes terminaron segundas tras la rutina técnica de la ronda preliminar, ya avanzaron en declaraciones a la prensa que creían que no se lo iban a dejar llevar.
"Rompe demasiados esquemas para unos Juegos Olímpicos", dijo Fuentes, quien con Mengual forma parte también del equipo que iniciará la competición el próximo viernes día 22.
No obstante, las nadadoras confiaron en poder lucir el rompedor traje en próximas competiciones internacionales, en un deporte en el que nada es poco para impresionar a las jueces.