Futbolistas de la Serie A italiana decidieron realizar una huelga si no llegan a un acuerdo con la liga sobre un contrato colectivo hacia el 30 de noviembre, dijo este viernes el sindicato.
Las dos partes han estado dialogando durante semanas sobre las propuestas de la Serie A para obligar a los jugadores a aceptar transferencias y un lugar fuera del primer equipo si sus clubes ya no los quieren, aspectos que son rechazados por el sindicato.
"La asociación de jugadores (...) esperará hasta el 30 de noviembre para anunciar la fecha de un día de huelga de partidos", sostuvo.
El presidente de la Federación de Fútbol de Italia, Giancarlo Abete, ha tratado de mediar en el conflicto, pero su sugerencia de que la Serie A y el sindicato discutarían un nuevo contrato colectivo sin mencionar el tema de los jugadores no deseados fue rechazado por la liga.
La postura de los clubes de la Serie A ha enfurecido al sindicato, que cree que ha hecho concesiones en el contrato colectivo que define los derechos básicos de los jugadores.
El contrato expira en la pretemporada.
Imagen negativa
Abete ha dicho que están intentando utilizar un panel de arbitraje independiente para solucionar el problema, pero con la federación luchando para desactivar el conflicto, el tema puede llegar al Comité Olímpico Italiano (CONI), que preside todos los deportes.
"Tengo fe en que antes del 30 de noviembre podamos llegar a un acuerdo sobre el contrato colectivo. El sentido común siempre prevalece", dijo a periodistas el presidente del CONI, Gianni Petrucci.
La huelga en septiembre se aplazó en parte debido a la falta de apoyo público al sindicato, dada la imagen negativa que generó que futbolistas millonarios emprendan acciones de este tipo en un momento de dificultades económicas para toda la población.
No todos los futbolistas están detrás de la última amenaza de huelga, pero la experiencia reciente de jugadores que quedaron fuera del primer equipo podría haber fortalecido la postura del sindicato.
Los jugadores de la Juventus Fabio Grosso y Hasan Salihamidzic fueron excluidos del primer equipo tras no llegar en agosto a un acuerdo contractual, pero la serie de lesiones en la "Vecchia Signora" ha provocado que ambos vuelvan a la acción.
En tanto, los internacionales italianos Federico Marchetti y Antonio Cassano están marginados del Cagliari y Sampdoria, respectivamente. El portero Marchetti pidió una transferencia, mientras que el delantero Cassano insultó al presidente de su club.
Dos paneles de arbitraje deportivo deben pronunciarse sobre si sus suspensiones son legales.
Un tribunal deportivo dictaminó a favor del macedonio Goran Pandev la temporada pasada, luego de que el delantero fue marginado por la Lazio por exigir un traspaso, y se le permitió firmar por el Inter de Milán en una transferencia libre.