Si se pudiera decir que existe un prototipo de mujer santandereana, habría que pensar en ella: frentera, tiene empuje y no se "arruga" ante nada. Lo demostró cuando exhibió sus senos en Soho . Eso le valió la censura de la parte más conservadora del público colombiano, pero también le valió aplausos. Juliana Galvis lo asumió con tesón. Dio la cara.
Expuso sus razones: en varias entrevistas aseguró que en Colombia se sorprendían más por un desnudo que por otros temas realmente graves, preocupantes. De ahí en adelante "no ha dado papaya" y la seriedad de su trabajo la tiene en el puesto de la villana más consentida de la televisión nacional: interpreta a María Ignacia en La Pola y a Lina Durán en Hilos de amor.
De antagónicos y villanas
"Soy una mujer común y corriente: tengo 23 años, estudié en un colegio de monjas y me gradué como administradora de empresas de la Unab de Bucaramanga. He tenido tres novios y vivo en Bogotá desde hace un año".
¿Cómo es que logró interpretar dos villanas en dos producciones diferentes al mismo tiempo?
"Es un gran reto porque son dos antagónicos al tiempo, pero es una manera de demostrar mis cualidades como actriz. Son dos personajes totalmente distintos el uno del otro, no solamente física sino emocionalmente".
¿Por qué cree que La Pola ha cautivado tanto al público?
"Es un producto diferente, es una telenovela que no cuenta una historia sino que cuenta la historia de un personaje de la vida nacional, un personaje que nos ayudó a todos: a los indígenas, a los negros, porque luchó por la igualdad. Nos hacía falta volver a nuestras raíces y creo que por eso ha sido tan exitoso".
Ardua preparación
¿Cómo le ha ido con los vestidos pomposos de la época y el vocabulario?
"Para mí ha sido una maravilla, definitivamente vestirse como princesa ayuda mucho al personaje de María Ignacia, creo que le da a todo un tono distinto, un tono sin muletillas, nos ha ayudado no solamente a mejorar como actores sino pues claramente a hablar mucho mejor en la vida cotidiana".
¿Cómo te acercaste a María Ignacia. Averiguaste sobre ella o la creaste desde cero? "Realmente sobre María Ignacia no hablan mucho en los libros, así que decidí recrear absolutamente todo lo que Juan Carlos (Juan Carlos Pérez, guionista) escribía; preferí dejarme llevar por mi instinto actoral y por la dirección de Sergio Cabrera, quien claramente es un director maravilloso".
La villana de H ilos de amor es muy mala; un personaje de los clásicos?
"Lina Durán es la villana verdaderamente villana. Es una mujer que está movida por el resentimiento y el rencor. Es una mujer que no ha podido perdonar muchas cosas de su vida y que al contrario, lo que quiere es venganza. Es supremamente ambiciosa y por conseguir sus objetivos es capaz de hacerlo todo".
¿Por qué es mejor ser la villana?
"Los villanos son personajes maravillosos, tienen un montón de matices. Son personajes para jugar. En una villana tú encuentras de todo un poquito. Encuentras el lado débil o el lado humano: ese mismo lado de rabia y resentimiento que seguramente todos los seres humanos tenemos. Con el villano te puedes divertir más y aparte de eso creo que la gente tiene mucha recordación de los villanos".
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6