Mientras que se espera que en el mes de abril sea el lanzamiento a las salas de cine colombianas de Roa, se confirmó que esta película colombiana fue seleccionada para el acto inaugural de la edición 53 del Festival Internacional de Cine de Cartagena, que se realizará el próximo 21 de febrero.
Este es el tercer largometraje del director caleño Andi Baiz, el segundo que está basado en una novela que a su vez se inspiró en un hecho real, pues Satanás, su ópera prima, fue la adaptación cinematográfica de la galardonada novela del mismo nombre del escritor Mario Mendoza, quien tenía como columna vertebral a un personaje inspirado en Campo Elías Delgado que protagonizó una masacre a mediados de los años ochenta en Bogotá.
Ahora, luego de La cara oculta, una de las películas colombianas más taquilleras de 2012, vuelve con Roa, basada en el libro El Crimen de Siglo, de Miguel Torres, con la cual el escritor y dramaturgo bogotano inició una trilogía literaria entorno a los hechos ocurridos el 9 de abril de 1948 en el conocido Bogotazo.
Rodada por las calles y sitios emblemáticos de la capital del país, esta película es protagonizada por la galardonada actriz colombiana Catalina Sandino, quien interpreta a María, la esposa de Juan Roa Sierra, personaje realizado por el actor de teatro Mauricio Puentes, pues la historia se concentra en el señalado asesino de Jorge Eliécer Gaitán y no en el Caudillo.
El rodaje del largometraje se realizó en más de 45 locaciones de la ciudad, particularmente los barrios del centro, incluidos La Candelaria, la Perseverancia, Teusaquillo, Palermo, y el centro histórico.
El reto era aún mayor para el joven director colombiano al tener que buscar locaciones y manejar espacios que mostraran a la Bogotá de 1948, eliminando todo aquello que podía remitir al espectador a la época actual, como publicidad, graffitis, semáforos, carros y hasta TransMilenio.
Sin olvidar los sonidos propios de la ciudad, pues muchas de las locaciones se encontraban inmersas en zonas de alto tráfico peatonal y vehicular.
Todo un proceso que requirió un minucioso cuidado desde el vestuario, la forma de hablar de los personajes, los modales y toda la atmósfera de una ciudad en crecimiento que tenía como símbolo un tranvía.
Para Mónika Wagenberg, directora del Festival Internacional de Cine de Cartagena, “es un honor contar con la premiere mundial de una película que demuestra el gran potencial y ambición del cine nacional. Roa nos permite viajar a 1948, sentir la emoción que despertaba Jorge Eliécer Gaitán, desvelar el enigma de quién fue Juan Roa Sierra, y revivir las horas tristes del Bogotazo”, afirmó.
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