Quería conocerlo más, pues lo referenciaron como un estudiante destacado dentro de su colegio: el San José de la Salle, y la idea era saber más acerca de sus expectativas ahora que está próximo a ingresar a la U. Sin embargo, apenas respondió a algunas de mis preguntas perfectamente pude confundirlo con una persona de experiencia superior, a los escasos 16 ó 17 años que calculo pueda tener Manuel Andrés Valencia Álvarez.
Tenía que empezar por saber cuáles son las enseñanzas que le dejará su paso por el colegio y la respuesta no fue otra más que "encontrar sabiduría en el conocimiento".
Su respuesta fue casi filosófica, pero luego me explicó que se trataba de aplicar lo vivido en el colegio a las diferentes situaciones que se le presenten a lo largo de su vida.
"He aprendido más que a ser un ser humano, a ser persona y a respetar con principios a los que me rodean para poder entregar así una ayuda desinteresada de la que, si me lucro, será por añadidura, siempre con los principios lasallistas", explicó.
El paso a la educación superior
La preparación previa es importante y no solo en materia de conocimiento, sino en la búsqueda de ayuda profesional que facilite la elección más acertada del programa por seguir.
Y esa ha sido la tarea que hasta ahora ha hecho Manuel, a través de conferencias de las diferentes carreras y áreas de estudio, las posibilidades actuales y las pruebas de orientación profesional.
"He empezado también a explorar el desarrollo de la inteligencia emocional para desenvolverme en los ambientes universitario y laboral. También he complementado con idiomas como el inglés y francés y estudiando diferentes culturas, su modo de pensar, actuar y de demostrar el verdadero desarrollo para globalizar mi mente", señaló.
Aunque la expectativa por su ingreso a la universidad es alta, Manuel no niega sentir algo de temor cuando se enfrente a esa experiencia, y aseguró que espera encontrar allí un grupo de personas con las que pueda tomar decisiones para mejorar la situación del país.
Para nadie es un secreto que elegir la carrera no es una decisión que se tome de la noche a la mañana, así que mientras llega el momento, Manuel tiene dentro de sus posibilidades contaduría pública o negocios internacionales.
"Para esa elección siempre cuento con el apoyo de Dios, mis padres y mi familia, mirando hacia adelante y corrigiendo paso por paso para no darme cuenta del error cuando sea demasiado el camino recorrido", concluyó.
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