Los últimos siete años para Lizardo Díaz y su familia no fueron nada fáciles con su lucha contra la hidrocefalia que lentamente le iba afectando uno a uno sus órganos vitales, hasta que el pasado jueves en la noche falleció, rodeado de sus seres queridos, en especial de Raquel Ércole, el amor de su vida.
En su última semana entró en estado crítico por lo que sus hijos, la mayoría de ellos viven en el exterior, volvieron al país para acompañar a su padre en sus últimos días.
Así lo hizo Patricia Ércole, su hija, la reconocida actriz y bailarina quien acompañó a su padre hasta el último suspiro. “La familia estuvo siempre a su lado y en los últimos días había perdido el estado de conciencia. Cuando empezaron a llegar mis hermanos, ellos le hablaban y él abría sus ojos azules y con sus cejas se comunicaba con nosotros”, comentó Patricia.
Fue una semana dolorosa pero a la vez una oportunidad, según su hija, para despedirse y agradecerle por todo lo que él les dio. “No nos cansamos de recordarle que lo amábamos, que le agradecíamos el hogar que nos dio y el legado que es nuestro mayor tesoro y que además compartió con todo un país”.
Pero además reconoce, que tras siete años de lucha contra este trastorno irreversible, que tiene como principal característica la acumulación de líquido en el cerebro, ya era tiempo que su padre descansara.
“Estuvimos en oración para que se soltara, porque él estaba aferrado a la vida, al gran amor de su vida que era mi mamá, Raquel Ércole, porque le había prometido que no la dejaría sola”.
Entre los muchos recuerdos que guardará de su padre, así como lo harán muchos colombianos, está el humor que siempre lo acompañó, incluso en los momentos más difíciles.
“El humor de mi papá era para analizar, para saber si era en broma o estaba hablando en serio. Su chispa la conservó todo el tiempo”, comentó Patricia, quien dice que heredó de Lizardo su pasión por la lectura, por los viajes, así como pasar las tardes jugando golf en familia, porque para él, la familia siempre fue primero.
Este viernes se realizó la velación en la Funeraria La Candelaria, mientras que este sábado la misa será en la iglesia Cristo Rey y en la tarde se realizará la cremación del cuerpo.
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