"Cartagena tiene su aura mágica. Por eso se enamoró Gabo de este lugar", dijo Carlos Cuarón de visita en esa ciudad, donde ayer culminó el Festival de Cine que le abrió sus puertas para presentar su exitoso filme Rudo y cursi.
A las pantallas colombianas llegará este viernes su ópera prima como director, una historia divertida en la que ha vuelto a trabajar con Gael García Bernal y Diego Luna, ahora convertidos en astros.
Ambos interpretan a dos hermanos que rivalizan. Mientras el rudo (Luna) quiere ser futbolista, el cursi (García) sueña con ser cantante de música norteña...
Muchas críticas coinciden en afirmar que es una cinta divertida y sin grandes pretensiones, puro entretenimiento. ¿Está de acuerdo?
"Estoy de acuerdo en que no tiene grandes pretensiones porque yo soy alguien que no tiene grandes pretensiones. Ambiciono cosas pero no pretendo nada. Lo que pasa es que una película entretenida como ésta no demerita el valor artístico. Está muy bien hecha, tiene una fotografía hermosa y una dirección de arte espectacular, los actores están muy bien y la música es especialmente hermosa. Muchas veces la gente desprecia lo comercial como si fuera algo malo o ve lo entretenido como si fuera pecado".
¿Qué reflexiones propone?
"El tema principal es la hermandad. El sentido de que todos somos hermanos pero no queremos darnos cuenta. La película también es un retrato muy fiel del México actual y por lo tanto de Latinoamérica, y lo puedes ver como una crítica social aunque yo no quise denunciar nada. También toca la cuestión de ir de la pobreza a la riqueza y la fama... y lo efímero de ello. O el hecho de que el narco en un país como México, o como Colombia, lo permea todo. Es una película que pisa callos".
¿En qué se parece a Y tu mamá también?
"El viaje de los personajes es al revés. En Rudo y cursi parte de la costa del Pacífico mexicano a la ciudad de México. En Y tu mamá también es al contrario. Creo que comparten el sentido el humor, un sentido crítico de lo social y lo entretenida que son ambas. En ella trabajó la misma familia, pero son muy distintas en todo lo demás, en la manera como está filmada y en el cuento que se cuenta".
¿Cómo fue trabajar con Gael García y Diego Luna después de casi ocho años?
"Siempre es un placer y un gozo cuando puedes trabajar con gente tan cercana. Son como mis hermanos menores, sabemos ver nuestros estados de ánimos, nuestras fortalezas, debilidades, virtudes y defectos, y eso facilita mucho el trabajo. Veo la evolución de ellos como actores y como personas".
¿Cómo le asignó a cada cual su papel de rudo y de cursi?
"Gael quería hacer de rudo y Diego de cursi, pero mi respuesta fue que quería hacer algo distinto de lo que ya hicimos antes. Ellos son inteligentes e imaginativos, lo entendieron de inmediato y empezaron a aportar ideas para ubicarse cada uno como rudo y como cursi".
¿Usted es rudo o cursi?
"Yo soy un 50-50 perfecto".
¿Sueña con un Oscar?
"A menos de que sea Oscar de la Renta, yo no sé para qué soñar con un Oscar. Los premios son errores en la vida, son como las hemorroides que tarde o temprano suceden. Y espero que me suceda".
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