El tercer y/o cuarto canal podría empezar a transmitir señal y generar ingresos en el segundo semestre de 2009, si se valen de la red ya existente de los canales públicos y privados y si se aprueba que hagan las primeras emisiones por cable y satélite.
Se espera que en mayo de 2009 la Comisión Nacional de Televisión, Cntv, adjudique uno o dos canales privados nacionales en una licitación en la que participan tres consorcios liderados por los grupos Prisa, Planeta y Cisneros.
A partir de ahí se fijaría un plazo para que entren en operación mientras construyen su red. En el caso de Caracol y RCN, firmaron los contratos a finales de 1997, en julio de 1998 lanzaron emisiones de prueba y solo hasta el 11 de enero de 1999 entraron formalmente en operación después de un año de construir su propia infraestructura.
El o los nuevos canales podrían empezar a operar mucho más rápido, pues en vez de tender una tercera red, pueden utilizar las que ya tienen el consorcio de canales privados o Radio Televisión Nacional de Colombia, Rtvc, que administra la red de los canales públicos.
Rtvc está a punto de abrir una licitación para contratar una banca de inversión que adelante una “valoración técnica y empresarial del estado actual de la red pública nacional de radio y televisión, de las inversiones necesarias para su completa modernización y digitalización y del potencial de explotación de esta infraestructura”.
El estudio que se contratará por 1.294 millones de pesos, buscará escenarios para minimizar los recursos que el Estado invierta en la red y contemplará a futuro la integración de la gestión de las redes públicas regionales y privadas.
La idea es que la red pública sea no solo un gasto para la Nación sino que genere recursos propios con el desarrollo de negocios como el arriendo de infraestructura al nuevo canal privado. Con esos recursos se puede financiar la actualización de los equipos y la migración del sistema análogo a digital y se dejaría de depender solamente de los dineros que transfiere la Cntv.
Así las cosas, pareciera que el arrendamiento de redes es un modelo en el que ganan todos. Los grandes conglomerados que aspiran al tercer canal, aunque cuenten con los recursos para construir su propia red, podrían preferir valerse de una de las dos existentes pues así tendrían su señal al aire más pronto, captar audiencia más rápido y comercializar espacios cuanto antes. La Cntv podría permitirles emitir señales de prueba por los sistemas de televisión de cable o satélite tan pronto tengan una parrilla de programación consolidada y así, antes de tener red o de negociar con las existentes, llegarían a 69 por ciento de la población. La Cntv también se beneficiaría pues empezaría a recibir más pronto la compensación por publicidad que debe pagar el nuevo canal.
El presidente de RCN, Gabriel Reyes, manifestó que físicamente no es viable la puesta de más transmisores ni antenas para otro operador en la red que comparte su canal con Caracol. El viceministro de Comunicaciones, Daniel Medina, sin embargo, dijo que los canales privados ya están más receptivos al tema para que abran su infraestructura y la arrienden a los nuevos operadores. El gobierno busca la manera de que no se dupliquen redes y de que la televisión funcione como en Europa donde una sola red transmite para canales públicos y privados, dijo.