Un niño muerto y daños materiales arrojó la explosión de una granada de fragmentación que desconocidos lanzaron al interior de una vivienda ubicada en el barrio San Antonio, en la zona noroccidental de Tuluá.
El atentado se produjo este viernes hacia la 1:00 p.m., en la carrera 28A número 17-08.
En esa casa, en donde habitan dos familias, se encontraba un niño de siete años viendo televisión en la sala cuando de repente se escuchó un gran estruendo.
“Mi esposa y yo estábamos en otra habitación cuando de repente escuchamos un golpe en el techo y pensé que era otra piedra de las que nos lanzan los vagos desde la parte de atrás de la casa”, manifestó Apolinar Mendoza, padrastro del niño muerto.
El señor Mendoza indicó que el artefacto rodó varios metros por el pasillo de la casa y explotó justo en donde se encontraba Jan Carlos García, de siete años.
De inmediato, los familiares de la víctima trasladaron al pequeño hasta la clínica San Francisco, a donde llegó sin signos vitales.
“Invitamos a la comunidad y a los vecinos del sector para que nos suministren información que nos permita dar con los responsables de este hecho”, indicó el comandante del Segundo Distrito de Policía con sede en Tuluá, teniente coronel, Javier Humberto Vargas Palacios, quien dijo que la Sijín y el CTI de la Fiscalía adelantan la respectiva investigación.
