El mejoramiento de la vida de las personas con discapacidades físicas y cognitivas es la misión en la que desde 1972 trabaja El Comité, organización social especializada en la creación de procesos inclusivos que les permita a las personas con discapacidad obtener independencia y autonomía.
En este sentido, ha desarrollado cuatro unidades estratégicas para cumplir su objetivo. La primera es Servicios de Salud, a través de la que ofrecen consultas especializadas, terapias, evaluaciones diagnósticas y programas a la población con discapacidad. También cuenta con Productos y Servicios de Apoyo en el que se da un proceso colectivo e interdisciplinario para intervenir, a través de estos elementos de apoyo, la cotidianidad de participantes y trabajar en sus necesidades particulares.
Otro de sus puntos de acción es el Programa de Formación que cuenta con una amplia oferta de programas formativos para la construcción colectiva del conocimiento. Además, está la Fundación que ha permitido que El Comité llegue a otras regiones del departamento y el país para atender personas con discapacidad en situación de vulnerabilidad gracias a un fondo de solidaridad.
“Debemos aclarar que las personas con discapacidad son personas como todos nosotros, pero que se enfrentan a barreras en el día a día que les impiden su participación en diferentes espacios. Las necesidades son las mismas, sin embargo las oportunidades son distintas. Por ello, se debe realizar un trabajo colectivo y personal para disminuir los obstáculos y crear un mundo más incluyente”, dice Sonia Marina Gallardo Gómez, directora ejecutiva de El Comité.
Una de las primeras estrategias que se desarrolló para concientizar sobre la importancia de tener más espacios inclusivos fue la caminata PANAM. En su segunda edición, en 1975, asistieron más de 300.000 personas que marcharon a favor de la inclusión, el bienestar, la calidad de vida y la dignidad humana.
Asimismo, un año antes alcanzó un convenio con el Sena para desarrollar programas de formación que involucrara a la población con discapacidad. Además, hizo la primera encuesta de invalidez del país en Medellín, que se elaboró de manera conjunta con El Comité, el DANE y la Universidad de Antioquia. Un avance para conocer sus necesidades y proponer mejores alternativas para una vida digna.
“Hacemos alianzas y convenios que permitan dar respuesta integral a las necesidades de las personas con discapacidad desde los sectores que lo requieran para ser y sentirse ciudadanos activos. Igualmente, trabajamos con las familias como el primer círculo de inclusión y el pilar fundamental para la rehabilitación”, afirma Gallardo Gómez.
Su compromiso ha sido trabajar de manera continua por la dignidad y autonomía de las personas en situación de discapacidad. Por esto, en 1985 realizó por primera vez El Día de El Comité con una transmisión televisiva, una colectiva pública y un evento artístico que permitieron visibilizar las problemáticas y causas bandera de la organización.
En cinco décadas, su labor se ha centrado en el fortalecimiento de sus servicios y en promover acciones que ayuden a las familias y a los entornos sociales a ser más incluyentes.
Celebrar los 50 años
En la Conmemoración del Cincuentenario, El Comité ha recibido distintos reconocimientos por su labor, trayectoria y resultados sociales, entre ellos se destacan: Orden al mérito Don Juan del Corral y la Condecoración Orquídea al Mérito Humano y Social por parte de El Concejo de Medellín; la medalla al mérito Pastor Bonus otorgada por la Universidad Católica Luis Amigó y la Orden al Mérito Mariscal Jorge Robledo que le otorgará el próximo 29 de noviembre la Asamblea Departamental de Antioquia. Además, se adelantan una serie de celebraciones en redes sociales y, de manera presencial, para agradecer a quienes han participado en estos años en los procesos.
El trabajo de la organización apunta a incrementar la inclusión hasta que sea algo natural, que no sea necesario darle un nombre o se necesite hacer un reconocimiento a quien lo haga. Un día en el que la responsabilidad social esté en las esferas comunitarias y personales y el trabajar por las personas sea una prioridad como sociedad.
“Hoy, cuando celebramos 50 años de labores, reflexionamos sobre los aprendizajes de estas cinco décadas y llegamos a la conclusión de que la discapacidad va a seguir existiendo mientras exista la humanidad, podemos apuntar a prevenirla, incluso a disminuirla. Por eso, hoy El Comité se ve para los próximos 50 años como la institución que logre un cambio social y cultural que permita ver a todas las personas desde sus capacidades, porque el prefijo “dis”, debe salir de nuestro lenguaje para que equiparemos las oportunidades”, afirma Sonia Marina Gallardo Gómez.
* Contenido en colaboración con El Comité.