Luego del incidente en el clásico capitalino del sábado, en el que Gerardo Bedoya agredió a Jhonny Ramírez, el volante antioqueño pidió disculpas y el hombre de Millonarios las aceptó, en un hecho que ha generado polémica en Colombia.
La patada en la cara, cuando Ramírez estaba en el piso, por una primera agresión del mismo Bedoya, también generó el roce entre Edwin Cardona, de Santa Fe y Román Torres, de Millonarios, quienes también salieron expulsados del partido.
Un día después del incidente, Gerardo Bedoya reconoció que "me equivoqué muy mal, me dejé sacar del partido, él me pegó y me pegó y en ese momento me nublé y reaccioné como no debía".
Y añadió que "Nada justifica mi reacción y no lo iba a pisar, vi las imágenes y se vio muy feo. Yo no soy así. Asumo que me equivoqué, ojalá la sanción no sea tan drástica. Jhonny ha sido mi amigo".
Y como amigo, Jhonny aceptó las disculpas antes de viajar a España, para el juego amistoso del próximo miércoles contra el Real Madrid, en declaraciones a Caracol Televisión.
"Son golpes de partido, no hay ningún rencor, ni ningún tipo de represalias, porque yo me identifico con la forma de jugar de Gerardo, es un jugador muy aguerrido, muy temperamental y me gusta, por eso le envío un gran saludo, porque es un gran amigo y no pasa nada", comentó Ramírez.
Por su parte, el juez Fifa colombiano Hernando Buitrago, del reporte bogotano, afirmó que "es un hecho muy reprobable y a la luz del reglamento hay una conducta violenta, por eso el jugador (Bedoya) debe ofrecer disculpas públicas, porque indudablemente se equivocó".
Buitrago explicó que la sanción se basará de acuerdo con el informe del árbitro sobre el hecho y la última palabra la tiene la Comisión de la Dimayor, que determinará las fechas de suspensión para Gerardo Bedoya.