Reuters - En un proceso de paz como el norirlandés, cargado de momentos históricos, el apretón de manos protagonizado este miércoles en Belfast por la reina Isabel II y el excomandante del Ira, Martin McGuinness, pasará a la posteridad como un acto clave para la reconciliación en la provincia británica.
Reuters - Hasta en dos ocasiones, primero en privado y después en público, la monarca y el número dos del Sinn Fein, antiguo brazo político del ya inactivo Ejército Republicano Irlandés, Ira, estrecharon sus manos para dejar una instantánea difícil de imaginar hace apenas 15 años, tras la firma del acuerdo de paz del Viernes Santo.
Reuters - En su visita a la región, la primera en una década, la reina ha podido comprobar que Irlanda del Norte es ahora un lugar muy diferente, como lo demuestra el hecho de que ha llegado a saludar, cara a cara, al representante de un partido político cuyo brazo paramilitar la tuvo en el punto de mira durante el pasado conflicto.
AP - En Dublín, destacó el viceministro principal, la reina habló del sufrimiento causado a todas las víctimas del conflicto, incluidas aquellas provocadas por las fuerzas de seguridad norirlandesas y británicas y por los grupos paramilitares.