“Estar sujetos a los precios de referencia de los combustibles, cada mes, le ha dado estabilidad a los expendedores minoristas de combustibles, pero en algún momento esto tendrá que ser como en los grandes países, donde se aplican otros mecanismos para fijar esos valores”.
Así se expresa Álvaro Younes, presidente de la Federación Colombiana de Distribuidores Minoristas de Combustibles y otros Energéticos (Fedispetrol), gremio que agrupa 20 % de las Estaciones de Servicio (EDS) del país y cumple 60 años (ver Informe).
Para el dirigente “el costo de los combustibles podría ser menor, pero el Gobierno tiene dificultades presupuestales y eso no permite que los precios bajen más”.
Y mientras el valor de la gasolina y el diésel centra la atención de los dueños de vehículos mensualmente, esa dinámica afecta de manera muy particular al sector.
“En los últimos doce años, el nivel de imposiciones está haciendo más difícil el negocio”, comenta Younes, quien reconoce que alguna normativa es buena y necesaria, pero sostiene que los márgenes se rezagaron, provocando, incluso, incumplimiento de requerimientos gubernamentales.
Pide revisión
Fedispetrol aboga por una remuneración acorde con el servicio que prestan las estaciones. Considera “incomprensible” que sobre el precio del galón de gasolina que, de una u otra manera ha estado alrededor de los 8.000 pesos durante los últimos años, los distribuidores minoristas solo reciben 670 pesos brutos.
“El propietario de una EDS debe responder por salarios, prestaciones, pagos al Icbf, Sena, caja de compensación, EPS, ARL, servicios públicos, seguros, transporte de valores, mantenimientos preventivos y correctivos de los equipos, impuestos, y hasta permisos de bomberos y de vertimientos”, se queja (ver gráfico).
A la lista anterior, el sector añade que el régimen sancionatorio al cual está sometido es “asustador”, porque pone en riesgo el patrimonio de esas pequeñas empresas.
Pulso con mayorista
Desde hace varias semanas trascendió la demanda que otro gremio, Fendipetróleo, interpuso contra la mayorista chilena Terpel, por supuestas prácticas de competencia desleal, con las que se estaría acabando con pequeños distribuidores minoristas de combustibles de Colombia.
Frente a este pulso, Younes es cauto y declara: “los minoristas nos hemos quejado toda la vida y mantenemos diferencias con los mayoristas en algunos términos de los contratos o los precios, pero nunca se había llegado a instaurar demandas”.
A su juicio, esta coyuntura puede generar una crisis interna en la distribución de combustibles. Enfatiza que en las circunstancias actuales esa pelea se vuelve confusa, pero afirma que “uno no puede exigirle a un competidor que suba los precios para poder vender, porque eso sería cartelización. Habrá que ver quién tiene la razón”.
$7.786
precio de referencia del galón de gasolina en Medellín, según el Ministerio de Minas.