“Yo aquí no soy un número de cuenta, acá soy una persona, me conocen y saben cómo soy”. Así describe Luz Helena Mesa Fernández, su experiencia como asociada de la Cooperativa Financiera de Antioquia, (CFA).
Aunque la cooperativa tenga más de 327 mil millones de pesos en activos y dinero en excedentes por 3.780 millones, su ideología se basa en el bienestar de las personas.
“El cooperativismo sirve para ayudarle a la gente, ese es su único fin. Por desgracia en Colombia parece que hacer parte de una organización como estas es sólo de pobres y no es así. Acá estamos hablando de solidaridad”, asegura el gerente de CFA, Jorge Alberto Corrales Montoya.
No por menos, del total de 106 mil asociados y ahorradores de organización, el 90 por ciento son personas de escasos recursos.
Desde los días de calles empedradas en el municipio de Donmatías, el germen del cooperativismo ganaba terreno en Antioquia.
La historia de 15 años de la CFA, como la primera cooperativa financiera creada en el país bajo la Ley 454 de 1998, guarda la esencia de más de 50 años de dos realidad distintas.
Por una parte, la de la Cooperativa Donmatías, que le dio la oportunidad de financiación a ese municipio del norte de Antioquia.
“En 1965 empieza un desarrollo importante en la localidad, la cooperativa fue el cordón umbilical que gestó el progreso para ese municipio, tenía huertas para la gente, creó una cooperativa de transporte, y lo más importante, fue un ejemplo único para el país sobre cómo se puede hacer una organización sostenible y que piense en la gente”, detalla Corrales Montoya.
Por otro lado, está Cobancoquia, fundada en Medellín por los trabajadores de la entidad financiera que luego pasó a ser Banco Santander, vio posibilidades para sus asociados con el espejo del sector financiero. Tras juntar ambas experiencias en el año 2000, la recién creada CFA tenía el reto de no perder el zumo de sus orígenes.
“Los valores se mantienen, sobre todo porque uno ve el compromiso con los asociados, por hacerles mejor la vida”, relata Mesa Fernández, cuando recuerda cómo hace 20 años vio en la Cooperativa Donmatías una oportunidad de cumplir sus metas financieras.
Y la estrategia parece haber brindado frutos. En 10 años la cooperativa pasó de tener una cartera de 35 mil millones de pesos en el año de la fusión a 260 mil millones de pesos octubre de 2015.
“Los 15 años luego de la fusión han pasado muy rápido, pero se ven los cambios y la calidad del servicio sigue igualita”, agrega Luz Helena.