Ayer se escribió un nuevo capítulo en la novela por la distribución de Hyundai en Colombia.
Después de que el juez Sexto Civil del Circuito de Bogotá ordenó medidas cautelares para que la matriz de Hyundai sólo comercializara vehículos a través de Hyundai Colombia Automotriz (empresa de Carlos Mattos que perdió la representación de la marca en diciembre pasado), la empresa Neocorp, la nueva cara de la coreana en el país salió a defenderse.
En un comunicado aseguró que seguirá vendiendo los vehículos en Colombia y “no tiene conocimiento de ninguna medida tomada en tal sentido y no ha sido notificada”.
Por ende, añadió que es Hyundai Motor Company, la autorizada para vender los automotores de la marca desde enero de 2016 y actuará “en concordancia de los derechos y deberes que le otorgan los contratos suscritos”.
Pero este proceso hasta ahora empieza, pues las partes deberán suministrar pruebas para determinar si hubo irregularidades al momento de terminar el contrato entre la empresa de Mattos y la matriz coreana.
El empresario colombiano pide a la multinacional una indemnización tras la terminación del contrato de distribución que tuvieron por dos décadas.
En medio de este enfrentamiento quedan los usuarios, quienes están en un limbo: mientras Neocorp asegura que seguirá prestando sus servicios, Hyundai Colombia Automotriz hace lo propio.
Además, el director de la Aeronáutica Civil, Gustavo Lenis, quien presentó su renuncia a la entidad, pasaría a gerenciar a la nueva representación de Hyundai en Colombia.