Comenzó un nuevo pulso comercial entre entre Colombia y Panamá. El gobierno del vecino país firmó un decreto para aumentar, desde el próximo 16 de agosto y por el resto del año, los aranceles a flores, carbón, prendas de vestir y cemento proveniente de Colombia.
Esta medida fue tomada luego de que el gobierno Santos prorrogara el arancel mixto para calzado y vestuario proveniente de la Zona Libre de Colón, en Panamá.
El decreto del país centroamericano responde a que Colombia no acate el fallo de la Organización Mundial del Comercio (OMC) que exige derogar barreras comerciales para esos dos productos.
La ministra de Comercio Industria y Turismo, María Claudia Lacouture, explicó que Colombia mantendrá esta medida hasta que no se concerte una estrategia bilateral para combatir el comercio ilícito, las prácticas anticompetitivas y la subfacturación.
“Nos reuniremos con el gobierno panameño, pero se debe encontrar una salida que genere beneficios a ambos países”, dijo la funcionaria durante la inauguración de la Feria Internacional del Cuero y el Calzado de Acicam que concluye hoy, en Bogotá.
Mientras tanto, el gobierno panameño, en un comunicado, explicó que es necesario “adoptar medidas que garanticen la protección de los intereses esenciales para las relaciones comerciales”. Además, calificó las prácticas de Colombia como discriminatorias.
Para Eduardo Nayib Cristo, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias Colombo-panameña, la situación se agrava por falta de voluntad política de las partes: “Colombia no debe tomar una decisión a la ligera, porque afecta mucho las relaciones. Panamá abre las puertas, sin problema, y hemos colaborado hasta con el desempleo en este país”, acotó a EL COLOMBIANO.
Sin embargo, Javier Díaz Molina, presiente de Analdex, gremio de los exportadores, cree que la actuación de Panamá es para presionar: “lo que sigue es abrir un diálogo sensato”, concluyó.
*Por invitación de Acicam