La plataforma de criptomonedas Genesis Global Holdco LLC y dos de sus subsidiarias de préstamos se declararon en bancarrota en Nueva York, afectadas por su amplía exposición al colapso de la plataforma FTX en noviembre pasado.
Según publica The Wall Street Journal, la empresa se ha acogido finalmente al Capítulo 11 de protección por bancarrota a última hora de la noche del jueves en el tribunal federal del Manhattan.
La firma se declaró en bancarrota junto con Genesis Global Capital LLC y Genesis Asia Pacific Pte. Ltd., dos subsidiarias suyas.
La filial de comercio al contado y derivados de Genesis, el negocio de custodia y su brazo de corretaje, Genesis Global Trading, no están incluidos en la solicitud de declaración de bancarrota y continúan con las operaciones comerciales de los clientes, según el mismo medio.
Hace unos días, otro medio, Financial Times, publicó que Genesis acumulaba deudas por valor de más de 3.000 millones de dólares (unos 2.770 millones de euros).
El conglomerado estadounidense Digital Currency Group (DCG), matriz de Genesis y otras firmas del ecosistema de las criptomonedas, como el diario digital CoinDesk y el gestor de inversiones Grayscale, exploraban la posibilidad de vender parte de sus activos para costear esa deuda.
De otro lado, desde Tokio se informó que la plataforma de criptomonedas Coinbase decidió detener sus operaciones en Japón debido a la volatilidad del mercado de estos activos, días después de anunciar un recorte de plantilla por la caída de la demanda.
“Debido a las condiciones del mercado, nuestra empresa ha tomado la difícil decisión de detener las operaciones en Japón y realizar una revisión completa de nuestros negocios en el país”, anunció Coinbase en su blog, donde señaló su compromiso de que la transición sea “lo más fluida posible” en favor de sus clientes.
La empresa aseguró en el texto que ha segregado los yenes y activos pertinentes en conformidad con la ley y que todos sus clientes podrán retirar sus activos “lo antes posible”.
“La funcionalidad de depósito fíat se eliminará el 20 de enero”, dijo Coinbase, que añadió que los clientes en Japón tendrán hasta el 16 de febrero para retirar sus tenencias en la plataforma, ya sea mediante el traspaso a otro monedero o liquidando su cartera y retirando sus yenes a una cuenta bancaria.
Tras esa fecha, las tenencias de criptomonedas no retiradas se convertirán a yenes y se enviarán a la Oficina de Asuntos Legales, a la que los clientes habrán de acudir si quieren recuperar su saldo.
El cese de las operaciones de Coinbase en Japón se produce pocas semanas después de que otra casa de intercambio de criptomonedas, Kraken, anunciara que dejará de operar en el país el 31 de enero.
El mercado de las criptomonedas atraviesa momentos difíciles en medio de la caída del valor de estos activos debido a la subida generalizada de las tasas de interés y el colapso de importantes actores del sector como FTX, que ha desplomado la demanda.
En este escenario, plataformas como Coinbase, Crypto.com o Huobi han anunciado un recorte del 20% de sus plantillas, que habían aumentado de forma significativa durante el “boom” que el sector vivió con el estallido de la pandemia de covid-19.
Coinbase es uno de los principales actores en el sector de las criptomonedas y salió a bolsa en abril de 2021 con una valoración de unos 85.000 millones de dólares, pero desde entonces su cotización se ha desplomado casi un 90%.
Las coyunturas de Genesis y Coinbase coinciden con las denuncias de amenazas en su contra, hechas por el fundador de la quebrada empresa de criptomonedas FTX, Sam Bankman-Fried, quien está recluido en su casa de Palo Alto (California), donde espera ser juzgado en Nueva York por supuestos delitos de fraude.
Al parecer, un vehículo de color negro se estrelló contra la barrera metálica situada frente a la vivienda donde el criptoempresario reside con sus padres. Después, tres ocupantes salieron del vehículo y profirieron amenazas.
“Tres hombres se bajaron del auto. Cuando el guardia de seguridad que estaba de turno se enfrentó a ellos, los hombres dijeron algo como: 'No podrán mantenernos fuera’”, reza un escrito presentado por el abogado de Bankman-Fried en Nueva York y recogido por el canal CNN.
Tras el suceso, los tres ocupantes volvieron al vehículo y se fueron sin que el agente de seguridad pudiera ver el número de la matrícula.
El pasado diciembre, Bankman-Fried acordó pagar una fianza de 250 millones de dólares para poder residir confinado en la vivienda de sus padres hasta el comienzo del proceso.
Bankman-Fried debe llevar en todo momento un sistema de geolocalización y se comprometió a entregar el pasaporte y recibir un tratamiento psicológico y contra el abuso de drogas.
Entre los delitos que se le imputan están los de fraude electrónico, lavado de dinero y violación de las leyes de financiación de campañas políticas vinculados a su gestión de FTX, que llegó a estar valorada en 32.000 millones de dólares.