Un simple ejercicio de geopolítica proyectiva -territorio, historia, recursos y voluntad humana- parece indicar que los elementos de una balcanización del país se están dando: geografía diferenciada, un Estado débil, desigualdad social, impunidad rampante, crisis económica en desarrollo y una nomenklatura estaliniana armada que no ceja en su empeño por la toma del poder.
Si en la frontera con el Ecuador las farc administran una retaguardia logística consolidada, en el Catatumbo están desarrollando su primer territorio autonómico.
Allí, confluyen abandono estatal, petróleo, narcotráfico, descuido estratégico del gobierno de turno disfrazado de prudencia y un país vecino que acoge y narcotrafica con los terroristas. Este límite colombo–venezolano,...