De la fachada del Palacio de Correos de Madrid, sede del ayuntamiento de la capital española, ha colgado durante más de un año una gigantesca pancarta con el eslogan “Refugees welcome”. Al margen de que el colgajo afeaba uno de los monumentos más fotografiados de Europa, su leyenda no era más que uno de esos guiños absurdos de la nueva-vieja izquierda poscomunista, tan carente de referentes ideológicos desde la caída de la Unión Soviética que se agarra a patochadas de este tipo sin analizar la realidad de las causas que apoya.
Y es que los castrochavistas de Podemos que gobiernan Madrid con el apoyo de los socialistas, que ahora les han devuelto el favor para desalojar a la derecha del Gobierno de España sin pasar por las urnas, solo viven de...