“Si cedemos al odio, la desesperación y la violencia nos rebajaremos al nivel de los opresores que usan la intimidación, la coerción y la fuerza”. Pedro Antonio.
En esta contienda electoral hemos visto una colección de traiciones impulsadas por el viento de las encuestas, supuestamente justificadas por el falso dogma de que la política es “dinámica”, en vez de ser la manifestación de la coherencia. Incluso hemos visto a traicionados que regresan en busca del sombrío de quienes los dejaron tirados hacía semanas. Qué decepción que la necesidad de votos termine pisoteando la dignidad.
Pero lo más lamentable ha sido el uso de la coerción, de meterles miedo a los electores con el falso dilema de escoger entre la “guerra” y una “falsa paz”, disfrazada...