Miramos con especial atención estas elecciones en Estados Unidos movidos entre la curiosidad y la perplejidad por la posibilidad, que parece desvanecerse en las últimas semanas, de que un tipo que parece más que nada un matón de escuela con plata pueda llegar a convertirse en presidente. Cada día se lanzan nuevas hipótesis de por qué un personaje que claramente es tan opuesto al candidato modelo en Estados Unidos y hace lo contrario a lo que pide la política gringa en este tipo de confrontaciones, haya llegado hasta acá.
Lanzo otra conjetura. El principal apoyo popular a Trump está soportado en una amplia población de estadounidenses blancos que de alguna forma sienten que su país ha perdido fuelle, que sienten nostalgia por un pasado mejor y...