Finalizando uno de sus cursos en la Universidad de Antioquia, le escuché al profesor Vladimir Zapata una frase que marcó mis convicciones. Decía: “Es sospechoso que un maestro sea tan necesario en enero como en noviembre”. Se refería a la necesidad de fomentar y hacer crecer, durante el curso escolar, la autonomía de los estudiantes. Cuanto menos necesiten al maestro, mayor será su nivel de independencia, el que permite crecer, innovar e, incluso, superar al mismo maestro. Años atrás, lo había escrito Nietzsche en su libro “Así hablaba Zaratustra”, con esa escena, de inmensa profundidad, cuando el maestro, dirigiéndose a su discípulo, le dice: “Ahora te ordeno que me abandones”.
Pero la autonomía no es una facultad que se adquiera por decreto,...