Por Jennifer Weinerredaccion@elcolombiano.com.co
Una vez quedó claro que Filadelfia sería la anfitriona de la Convención Nacional Demócrata, y que Hillary Clinton sería la nominada, empecé a pensar en mi ciudad, y lo bien que le queda a ella.
He vivido aquí desde 1994. Vine a trabajar como reportera, y me quedé para escribir libros y criar a mis hijas.
Para muchas personas, Filadelfia aún es el poco pulido paradero de Acela entre los relucientes polos de Washington y Nueva York. Aquí estamos, en la mitad, un poco ignorados, un poco resentidos, complementando nuestro propio lugar, propensos a ser susceptibles si usted sugiere que somos Brooklyn Lite o que no somos más que ‘Rocky’.
Nuestras atracciones dan la sensación de “comer las verduras” - Independence...