La democracia, más que un sistema de gobierno, es un método para vivir entre los humanos, sin recurrir a la violencia. No obstante, tiene una norma de oro, no la única: las mayorías son quienes deciden, las minorías aceptan su derrota y las mayorías están obligadas a respetar y proteger a las minorías. Los derechos de las mayorías son iguales a los derechos de las minorías, por ejemplo, la libertad de pensamiento, la de expresión, la de movilización, la libertad para escoger credo religioso o ninguno.
La filosofía del Estado democrático es la liberal, valga decir, el pensamiento o doctrina liberal equivale a la energía que va por los cables y que mueve a una sociedad productiva en ideas, propuestas o trabajo. Los matices de las democracias dependen...