Si existe un tema ilustrativo acerca de las diferencias de comportamiento individual entre Oriente y Occidente, es el que tiene que ver con el mercado de desodorantes en China, un asunto estudiado hasta el cansancio por los expertos de mercadeo del mundo.
Una masa humana de 1.400 millones de potenciales consumidores debe ser un objetivo prioritario para las empresas que manufacturan productos de higiene corporal de consumo masivo como jabón, desodorante o pasta de dientes. Pero la cuesta resulta ser particularmente empinada, debido a la inclinación cultural china a asearse menos que en otros países del mundo. La sabiduría china parece haber transmitido, de generación en generación, que el uso excesivo del agua – y evidentemente de los detergentes...