En tres días los colombianos elegiremos gobernadores, diputados, alcaldes, concejales y ediles. Es un momento sustancial de la democracia en la que decidimos quién gobernará las localidades en los siguientes años; supone la ruptura de trayectorias o la consolidación de modelos. Esto convierte la decisión personal del voto en una acción colectiva por sus consecuencias. De hecho, el voto secreto tiene efectos públicos. Por eso quisiera contarles mis votos a Alcaldía y Gobernación para este 25 de octubre.
Esta columna no es una sugerencia a votar por estas personas; solo una confesión de mi parte. Lo que quiero es compartir mis decisiones y razones e invitarlos, si no se han decidido o tienen dudas sobre sus opciones, a revisar a estas personas,...