Los recientes eventos que han conmovido la opinión nacional, obligan a una reflexión profunda sobre el alcance de la conducta de los servidores públicos y su juzgamiento social, en términos de moralidad; o judicial, de acuerdo con las normas legales.
A partir de la posguerra se hace énfasis en una nueva orientación normativa. El postulado universal de la legalidad y la contundente separación entre lo legal y lo moral, se desvanece para dar paso a un nuevo esquema normativo, preocupado por visibilizar los efectos públicos del comportamiento moral y dejar de lado la clásica división entre lo jurídico y lo ético. Se reafirma la idea de la moral pública, como una manifestación concreta de la ética social.
El constituyente del 91 no fue ajeno a este...