“Para que sean una forma de prevenir y no un ahogo económico o de abuso para la ciudadanía, ni mucho menos un negocio”. Así se refirió a las fotomultas el alcalde Federico Gutiérrez, justo cuando anunció la suspensión de estas en los casos de vencimiento de SOAT y revisión técnico-mecánica.
Y tiene razón al advertirlo de esa forma, pues esta medida se convirtió en un escandaloso negocio: entre el 15 de diciembre de 2015 y el pasado 30 de agosto, en la ciudad se registraron 274.373 comparendos de ese tipo. Hay casos absurdos: un mismo día se repetía la multa hasta tres veces. Se conocieron historias de conductores que debían hasta 20 millones de pesos por la misma infracción.
Este gran negocio de las fotomultas ha sido tema de columnas de opinión,...