Hay libros que se escriben con pluma y papel; otros en computadora. Pero el del prisionero político venezolano, Leopoldo López, se escribió literalmente en la piel.
Los guardias en la prisión de Ramo Verde en Venezuela, donde está encarcelado López desde el 18 de febrero de 2014, tienen instrucciones de evitar que escriba. El régimen de Nicolás Maduro no quiere que sus palabras se escuchen fuera de la prisión. Pero hay maneras de hacerlo.
Así me lo contó su esposa y activista por los derechos humanos, Lilian Tintori: “Lo que hacía su hermana Diana es que escribía en su piel párrafos [del libro]. Su mamá se escribió en una pierna y así se los llevaba. Yo también me llevaba papelitos o en mi misma piel”. Lo que estas tres mujeres se escribieron...