Estación Misiles, a la que llegan los que necesitan justificar acciones de guerra, demostrar poder, parecerse a los héroes de los cómics, poner en demostración nuevas armas para luego colocarlas en el mercado, posar de salvadores de la humanidad y regar toda clase de fake news (falsas noticias) para que haya miedo. Porque esto del miedo, del que Albert Camus dijo que era una estrategia para gobernar en tiempos de desgobierno, es la constante en un mundo que hoy se parte de nuevo en dos bloques políticos, renovando la guerra fría y creando diablos. Y para que cada bloque se reafirme, hay que sacar a pasear el armamento, hablar de espías peligrosísimos, buscar más envenenadores en los metros, usar radares ultrasensibles para que el enemigo no...