Esta repetida frasecita se ha convertido en la disculpa frecuente del Gobierno para explicar gran parte de los males que nos afligen.
Y es verdad, casi desde el inicio del gobierno del presidente Santos nos sorprendimos cuando descubrimos que nos estaba traicionando como ‘nunca antes’. Votamos por él porque prometió continuar con la seguridad democrática que disfrutábamos, en medio de una paz relativa y un buen desempeño económico.
Después de tres años de negociaciones, nos encontramos hoy frente a concesiones del Gobierno para incentivar el negocio del narcotráfico, el combustible de todas las guerras pasadas y futuras. Nos encontramos creyendo que las Farc van a participar efectivamente en la sustitución de los cultivos ilícitos y en acabar...