Juliana Robledo tuvo una adolescencia marcada por las inseguridades y los complejos que implica esta etapa de la vida, pero logró transformar su comportamiento para convertirse en lo que es ahora, una mujer llena de sueños y metas por cumplir en su vida profesional, donde el modelaje y la actuación marcaron el inicio de una carrera en la producción audiovisual. Juliana, ¿qué le llamó la atención de Twitter cuando comenzó a utilizar esta red? La cuenta la abrí hace seis años, cuando concursaba para ser Señorita Bogotá. Entonces, no entendía su uso. Pero últimamente he notado que, para mí, funciona como una herramienta de expresión muy efectiva. ¿Efectiva por qué? “Porque es inmediata, gratuita y me permite llegar a mucha gente”. Cuéntenos de usted. Vemos que, en su bio, tiene varias actividades. ¿A qué hora realiza tantas cosas? “Aunque la vida es corta, hay tiempo para todo. Y, si se fijan, la mayoría de actividades que realizo hoy en día, están conectadas gracias a las redes”. ¿Cómo logra conectarlas? ¿usted misma maneja sus redes sociales? “¡Claro! Primero: No tengo plata para andarle pagando a un CM. Segundo: Descubrí que es una actividad que me encanta. Me ha permitido definir mi identidad. Puede sonar raro, pero soy de quienes necesitan reafirmarse ante el mundo”. Siendo modelo, en sus trinos notamos ciertos aires feministas ¿no cree que una cora riñe con la otra? “Estaba esperando una pregunta así. Sólo puedo responder que todos somos seres contradictorios. Y ¡hey! también tengo derecho a ganarme mi platica como modelo. Pero sí, me cuestiono constantemente sobre el papel de la mujer, y sobre su visualización como un objeto”. ¿Busca quizás contrarrestar esa posible visualización, con su actividad en las redes? “Creo que mi propósito se ha cumplido. Eso es exactamente lo que espero que la gente note. No toda bonita es tonta”. ¿Alguna vez ha sentido que su intelecto no ha sido valorado por ser bonita? “Montones de veces. La belleza está estigmatizada, y siento que es lo primero que debo demostrar cuando me enfrento a alguien”. Vemos que también es escritora, ¿sobre qué le gusta escribir? “En este momento estoy trabajando como guionista en dos proyectos, uno para TV y otro para cine. Por lo demás, escribo cuentos, reflexiones y desde ya estoy adelantando mi autobiografía porque cuando tenga 70 no me va a dar el tiempo para redactar tanta memoria”. En su época de adolescente ¿imaginó tener la carrera y hacer lo que hace ahora? “En mi época de adolescente me vestía de negro porque estaba de luto por el mundo y quería estudiar filosofía o literatura... Tal vez sí, tal vez alcancé a imaginarme algo, muy borroso, pero algo”. Hay adolescentes que no se sienten conformes consigo mismas ¿qué les diría para que superen esos complejos? “Es difícil. Creo que es una época por la que hay que pasar. El sentimiento sólo un adolescente lo entiende. Tal vez que tranquilas, que sentir eso las hace crecer como individuos... y que se preparen porque lo de las hormonas nunca se regula”. ¿En qué producciones ha actuado y qué experiencia le han dejado estos trabajos? “La primera: una obra de teatro independiente en Buenos Aires, luego una obra de teatro infantil. Después ‘La Prepago’ y ‘Mentiras Perfecta’ para TV nacional. Finalmente, ‘Todas para uno’, un largometraje. Aprendí que la vida del actor es difícil y que tal vez prefiero estar detrás de cámaras y ser quien decide”. ¿Le coquetean mucho por Twitter? “Jeje. Bastante. Me divierte... soy bastante coqueta también, así que estamos a la par”. ¿En qué proyectos está trabajando actualmente? “Estoy trabajando en la preproducción de una web serie... estamos buscando recursos para desarrollarla. Y supongo que seguiré adentrándome en el mundo de la producción audiovisual y, por qué no, recibir un Oscar algún día”...