“Para chuparse los dedos”, dice el eslogan de Kentucky Fried Chicken. Y pareciera ser que la marca se toma la frase muy en serio: hace poco la cadena de comidas rápidas anunció que fabricó dos esmaltes de uñas comestibles con los sabores icónicos de la marca.
Los esmaltes vienen en los sabores “receta original” y “hot & spicy”. El “receta original” es color piel, mientras que el “hot & spicy” vienen en naranja oscuro. Ambos tienen un acabado brillante.
Para usarlos simplemente se deben aplicar como un esmalte regular, esperar a que se seque, y “lamerlos una y otra vez”, según un comunicado de la compañía.
John Koay, el director creativo tras el concepto, dijo a AdWeek que “la receta para nuestro esmalte comestible es única y fue diseñada específicamente para conservar el sabor, pero también para que su apariencia fuera similar a la de un barniz tradicional”.
Los esmaltes hacen parte de una campaña desarrollada en Hong Kong para generar expectativa alrededor de la marca. Por ahora están disponibles únicamente en el mercado chino.
Sumado a esto, KFC espera terminar un periodo de pruebas antes de producirlos en masa. Durante los últimos días han repartido muestras entre algunos de sus seguidores en redes sociales, para luego pedirles que voten por el sabor que más les gustó.
Una vez tengan los resultados del sondeo comenzarán la producción masiva del que tenga más votos. El sabor a pollo estará, entonces, al alcance de la mano.