Entre los conductores se generan prácticas que por la fuerza de la costumbre se van convirtiendo en rutina y se aceptan como una verdad indiscutible, especialmente en lo que tiene que ver con supuestos ahorros en el consumo de combustible y menor desgaste de las piezas del que componen los diferentes sistemas del carro.
O también están referidas a algunas situaciones que se presentan ya en la conducción como tal del vehículo y cómo deben afrontarse los retos que presentan las vías urbanas o las autopistas.
Por lo general conductores de muchos años son quienes con mayor énfasis recalcan y aplican estas supuestas recomendaciones. Se apoyan en su experiencia y en sus años frente al volante como el certificado que reviste de verdad sus afirmaciones, y ay del que se atreva a ponerlas en duda o mostrarles que pueden estar incurriendo en un error.
Muchas veces estas costumbres van pasando de boca en boca y de volante en volante, sin que quienes diariamente manejan un carro cuestionen o pregunten por su veracidad y por lo efectos que puede tener sobre la experiencia de conducción, e incluso sobre la seguridad de los diferentes actores que están interactuando en la vía.
¿Serán ciertos esos comentarios y esas prácticas al llevar un carro por la vía, que algunos dan como verdades reveladas e infalibles del mundo automotor?
Tres expertos en diferentes temas de conducción y de ingeniaría automotriz explican si estas prácticas, costumbres y frases hechas que los conductores van repitiendo entre sí tienen algún referente en la realidad o en la ingeniería que se aplica a la construcción y la operación de los automotores.
Puede que usted esté aplicando alguno de estos conceptos y en lugar de hacerle un bien a su carro y su manejo, termine perjudicado.