Si usted es de los que, en las noches, da vueltas en la cama y solo logra conciliar el sueño por momentos, con seguridad está sufriendo insomnio, un mal más común de lo que parece. Pero, ¿sabe por qué le sucede esto? Hay varios factores y los puede controlar usted mismo.
A esa condición, la Academia Americana de Medicina del Sueño la define como la dificultad para mantener o tener un sueño reparador, a pesar de contar con las mejores condiciones para el descanso.
Luis Guillermo Duque, docente de la Facultad de Medicina de la Universidad de Antioquia, explica que si se tiene una buena cama, se descansa en silencio y no entra luz, pero aún así, al otro día, la persona siente que no descansó lo suficiente, puede tener un trastorno que le impide gozar de un descanso restaurativo.
En los adultos, se considera que hay mal sueño cuando tarda más de 30 minutos en quedarse dormido. En los niños, si se demoran más de 20 minutos, indica el médico.
¿Qué causa el insomnio?
La “mala higiene del sueño” es la principal razón por la que no se duerme bien. Duque explica que este fenómeno se debe a la falta de responsabilidad con su propio descanso.
El uso de redes sociales, computadores, tabletas y otros equipos electrónicos no solo genera distracción, sino que la luz de las pantallas interfiere la secreción de melatonina (ver recuadro) y todos los neurotransmisores que producen el adormecimiento. Esto hace que usted cada vez esté más activo y le de dificultad de dormir.
El experto señala que hay varios tipos de insomnio. Uno de ellos es el de conciliación, que consiste en que la persona tarda más de media hora en dormirse.
También está el insomnio de despertar temprano (quienes lo padecen lo hacen antes de la hora indicada). Es muy común cuando alguien pone la alarma a las 6:00 de la mañana, pero se levanta antes de creyendo que lo cogió el tiempo. Quien se duerme con demasiada facilidad, pero se despierta cada dos o tres horas tiene desvelo de mantenimiento.
Otro tipo es el insomnio psicofisiológico, recurrente en pacientes con ansiedad, depresión, problemas personales o cualquier tipo de dolor físico.
¿Cómo combatirlo?
Maria Isabel Montes, especialista en sueño, dice que es necesario sacar del cuarto todos los aparatos electrónicos, tener un colchón cómodo, dormir a oscuras y procurar estar en un espacio de completo silencio. Resalta que ninguna persona se debe automedicar.
Duque, a su vez, añade que no es recomendable acostarse después de realizar ejercicio, debido a que el organismo aún tiene demasiada energía. Cuenta que hay que evitar las bebidas oscuras: café, chocolate y energizantes. No se deben consumir excitadores del sistema nervioso como lo es el cigarrillo.
Agrega que no se debe ir a la cama con hambre y tampoco muy llenos. La razón es que durante el proceso de metabolismo después de comer (cambios químicos y biológicos que se producen en las células), el cuerpo no se concentra en la acción de dormir.
¿Cuándo buscar ayuda?
Hay trastornos, como la apnea del sueño, en el que la respiración se interrumpe mientras se está dormido, problemas de ronquido y sobrepeso que requieren que un médico brinde las indicaciones necesarias, según Duque.
Cuando una persona ajusta tres semanas y no ha tenido un sueño reparador o cuando hay consecuencias diurnas de no dormir bien como irritabilidad, malas relaciones interpersonales, trastornos de memoria, falta de eficiencia en el trabajo, aumento de posibilidad de accidentes y bostezo excesivo es necesario buscar ayuda profesional.
La importancia de dormir
Los problemas del sueño causados por la respiración, por ejemplo, tienen consecuencias como la hipertensión y problemas cardiovasculares, según publicó la revista Science Direct en 2008, que además señala que puede relacionarse con la diabetes.
El médico resalta que el tiempo necesario para dormir en un recién nacido son veinte horas, mientras que un niño en edad preescolar debe dormir de 10 a 12 horas, por eso hay que ponerles normas para ir temprano a la cama.
En el caso de los adultos, deben identificar si son “dormidores” cortos o largos. Si lo hace durante seis horas y se levanta somnoliento, indica que necesita más horas. “La noche que usted no durmió perfectamente se paga en el día”.